domingo, 16 de mayo de 2010
LA SOCIOLOGÍA COMO CIENCIA EMPÍRICA
Introducción: Definiciones de Sociología
1.- Procesos del conocimiento. Saber vulgar y Saber científico
2.- Las ciencias empíricas: CC. de la naturaleza y CC. sociales
3.- Nacimiento y objeto de la Sociología: "El hecho social"
4.- Definición y objeto de la Sociología de la Educación
INTRODUCCIÓN: DEFINICIONES DE SOCIOLOGÍA
Definición por J. Jiménez Blanco
“Es una ciencia empírica de la organización de los grupos humanos”. Por lo tanto destaca ciertos aspectos fundamentales:
• Es una ciencia empírica
• Se ocupa de las organizaciones.
• Se ocupa delos grupos humanos
Definición por Teodor Caplow
“Es un estudio científico de las relaciones humanas y sus consecuencias”.
• Coincidencias entre las definiciones: la sociología se trata de una ciencia.
• Diferencias entre las definiciones:
- Jiménez Blanco estudia el grupo humano y su estructura
- T. Caplow estudia las relaciones humanas y sus consecuencias.
1.- PROCESOS DEL CONOCIMIENTO. SABER VULGAR Y CIENTÍFICO.
1.1. Saber vulgar y saber científico.
Todos los hombres poseen mayores y menores conocimientos según el grado y modo de participación en la totalidad de la cultura. En todos los hombres existen saberes y conocimientos, pero por las formas o tipos de adquisión pueden discernirse dos modos principales (aunque existen otros como el filosófico, el mítico, el religioso...):
- el saber cotidiano o vulgar.
- el saber científico.
Se sabe, pues, de manera natural por el solo hecho de vivir, y se sabe científicamente cuando existe disposición de conocer con arreglo a ciertos procedimientos.
a) Saber cotidiano.
Es el saber o conocimiento que se adquiere en la experiencia cotidiana. Se trata de conocimientos inconexos entre sí, a veces superficiales, constituidos por una yuxtaposición de casos y hechos. Es el modo común, corriente y espontáneo de conocer que se adquiere en el trato directo con los hombres con las cosas, es ese saber que llena nuestra vida diaria y que se posee sin haberlo buscado o estudiado, sin aplicar un método y sin haber reflexionado sobre algo.
Su contenido es la suma de todos nuestros conocimientos sobre la realidad que utilizamos de un modo efectivo en la vida cotidiana y del modo más heterogéneo (como guía para las acciones, como tema de conversaciones etc.) Existe un determinado mínimo de saber cotidiano. ¿Cuál es ese mínimo?, pues, la suma de los conocimientos que todo sujeto debe interiorizar para poder existir y moverse en su ambiente. Según las épocas y los estratos sociales, cambia el contenido y extensión del saber cotidiano.
Este saber cotidiano se caracteriza por ser superficial, no sistemático y acrítico.
- Cuando decimos que es superficial no es en el sentido de frívolo, insustancial o ligero, sino de que se conforma con lo aparente, con lo que comprueba en el simple pasar junto a las cosas. Se expresa en frases como porque me lo dijeron, porque lo vi, porque lo leí, porque todo el mundo lo dice; para este tipo de conocimiento el criterio de evidencia inmediata es suficiente.
- Otra característica que se le atribuye al saber de la vida cotidiana, es la de ser no sistemático, tanto en la forma de adquirirlos y vincularlos como en el modo de establecer cánones de validación. Se limita a percibir lo inmediato a través de experiencias, vivencias, estados de ánimo y emociones de la vida diaria, permaneciendo al nivel de certeza sensorial. El mismo sujeto organiza las experiencias y conocimientos de un modo no sistemático.
- Decíamos que también es acrítico, puesto que apoyado sólo en la evidencia inmediata, sólo percibe la epidermis de la realidad. Los conocimientos del saber vulgar pueden ser verdaderos o no, lo cierto es que la pretensión de serlo no se plantea de una manera crítica o reflexiva. Como ya se dijo, es un conocimiento que está al nivel de certeza sensorial, o sea, un saber que puede decir acerca de lo que pasa, pero no porque pasa lo que pasa.
b) Saber científico.
Sin embargo, debemos tener en cuenta que en nuestra época el saber cotidiano está penetrado por el saber científico. Se trata de algo reciente que se ha verificado paralelamente a la difusión de los medios de comunicación de masas. El saber cotidiano acoge (o puede suceder que acoja), ciertas adquisiciones científicas, pero no el saber científico como tal.
En su práctica social el hombre se enfrenta a una serie de problemas que no puede resolver con los conocimientos corrientes, ni por sentido común. Por otro lado, para el hombre que naturalmente desea saber, como decía Aristóteles, no le basta la captación de lo externo, ni el sentido común, puesto, que existen fenómenos que no se captan en el solo nivel perceptivo. Es preciso superar la inmediatez de la certeza sensorial del conocimiento ordinario. Este salto -que no supone una discontinuidad radical en lo que hace a la naturaleza, pero sí en cuanto al método- conduce al conocimiento científico.
Cuadro 1.1. Oposiciones entre el saber vulgar y científico
SABER VULGAR O COTIDIANO SABER CIENTÍFICO
Superficial Profundo o sólido
Asistemático o desordenado Sistemático o metódico
Acrítico Critico o auto-correctivo
Doxa o opinión Episteme o comprobado
1.2. Evolución de la noción de ciencia.
La palabra ciencia se deriva etimológicamente en las lenguas modernas del vocablo latino scientia. En el latín ciencia tiene un sentido muy amplio y significa: conocimiento, práctica, doctrina, erudición. Esta concepción latina de ciencia concuerda con el significado del origen de su raíz, el verbo latino scio que se deriva a su vez del griego isemi. Este verbo griego equivale también a saber, en toda la extensión de la palabra: conocer, tener noticia de, estar informado.
Por tanto, ciencia en su acepción original y más general, equivale a toda clase de saber. Sin embargo, históricamente, ciencia vino a significar, de modo más preciso, un conjunto de conocimiento sistematizado sobre una materia. Esta noción coincide con lo que hoy entendemos por disciplina. Y así, en este sentido, se puede decir que en la Edad Media las ciencias o disciplinas por antonomasia fueron la Filosofía y la Teología.
Con el desarrollo del saber experimental y la insistencia en el método inductivo, el concepto de ciencia ha quedado reservado modernamente para el conocimiento teórico, inductivo y sistemático sobre la realidad, derivado de la observación y experimentación metódicas.
1.3. Concepto y características actuales de la ciencia.
La ciencia se puede definir, en sentido estricto, como un conjunto de conocimientos sobre la realidad observable, obtenidos mediante el método científico.
Según esta definición son tres los elementos esenciales de la ciencia, que configuran su naturaleza: Un contenido, un campo de actuación y un procedimiento o forma de actuar.
a) La ciencia en cuanto a su contenido está constituida exclusivamente por un conjunto de conocimientos sobre la realidad, en forma de términos y de enunciados. Las ideas de este conjunto se hallan interrelacionadas entre sí y forman lo que se llama la teoría.
Es necesario darse cuenta de que la ciencia aunque se refiere a la realidad empírica, no está formada por hechos sino en todo caso por ideas. El hombre solo puede captar la realidad conceptualmente.
b) El campo de actuación propio y único de la ciencia es la realidad observable, la realidad de este mundo en que vivimos. Lo no empírico, digamos lo trascendente, cae fuera del campo de la ciencia. Esta no se puede pronunciar como tal, ni sobre su verdad, ni sobre su falsedad.
c) Por último, la ciencia utiliza como procedimiento o forma de actuación en la formación el conjunto de conocimientos que la integran, el método científico, que es el que la tipifica, como se ve a continuación.
1.4. El método científico.
Si analizamos etimológicamente la palabra método vemos que deriva de las raíces griegas metá y odos. Metá (hacia, a lo largo) es una proposición que da idea de movimiento y odos que significa camino. Por esto, en su estructura verbal, la palabra método quiere decir camino hacia algo, persecución, o sea, esfuerzo para alcanzar un fin o realizar una búsqueda. Método como forma ordenada de llevar a cabo determinadas acciones.
Lo más característico y específico de la ciencia, aquello que la constituye como tal y la distingue de los demás tipos de conocimiento es el método científico. La ciencia no se distingue de otros tipos de conocimiento por los objetos sobre los que versa.
La ciencia, pues, no es otra cosa que un conjunto de conocimientos obtenidos por la aplicación del método científico, y, por tanto, es el resultado de este método.
Por ello, un científico es, ante todo, no el que tiene muchos conocimientos sobre una materia determinada, lo que es importante y valioso, sino quien sabe utilizar correcta y eficazmente el método científico en su campo.
De aquí la importancia del método científico. A él hay que atribuir en gran parte, sin duda el extraordinario desarrollo de la ciencia. Se puede decir que la ha posibilitado.
No está demostrado que los hombres a partir del siglo XVII sean más inteligentes que los anteriores. Sin embargo, han hecho avanzar grandemente la ciencia porque abandonaron el método escolástico e iniciaron el método científico.
El método científico consiste en formular cuestiones o problemas sobre la realidad del mundo y los hombres, con base en la observación de la realidad y la teoría ya existentes, en anticipar soluciones a los problemas, mediante la observación de los hechos que ofrezca, la clasificación de ellos y su análisis.
- Método inductivo: Experiencia como punto de partida de generación de conocimientos.
- Método deductivo: Se establecen leyes generales (razonamiento) y se deducen consecuencias lógicas que se pueden contrastar con datos.
- Método hipotético deductivo. Conjunción de ambos. Conjunto de pasos secuenciados que se siguen al realizar una investigación:
a. Formulación del problema.
b. Formulación de la hipótesis.
c. Recogida de datos.
d. Análisis de datos y resultados.
e. Conclusiones y generalización de resultados.
1.5. Tipos de ciencia.
Delimitado el concepto de ciencia como un modo de adquisición de conocimiento de forma crítica y sujeto a un método, cabe ahora distinguir cuáles son los distintos tipos de ciencias.
En primer lugar podemos realizar una distinción entre ciencias normativas y ciencias positivas; mientras que la primera busca deducir a partir de un conjunto de principios y axiomas concluir cómo debería de ser la realidad, la segunda pretende inducir a partir de los datos empíricos y de los hechos como es la realidad. Resumiendo, las ciencias normativas como el derecho, ética y moral... son ciencias del deber ser frente a las ciencias positivas como la física, matemáticas, sociología..., que son ciencias del ser.
Cuadro 1.2. Oposiciones entre Ciencias Normativas y Positivas.
CIENCIAS NORMATIVAS CIENCIAS EMPÍRICAS
OBJETO o BASE El deber ser El ser
METODOLOGÍA PRINCIPAL Deductiva Inductivo e
Hipotético-deductivo
PRODUCTO Normas y principios Leyes
EJEMPLOS Ética, Derecho... CC.NN. y CC.SS.
El objetivo de este tema era ubicar la sociología en el contexto de los saberes, y como adelanta el título la sociología nos la vamos a encontrar junto a las ciencias empíricas o positivas. Toca ahora, por tanto desarrollar brevemente que tipos de ciencias positivas hay y cuáles son sus diferencias.
2.- LAS CIENCIAS EMPÍRICAS: CC. DE LA NATURALEZA Y CC. SOCIALES
Las ciencias positivas nos habla de lo que son las cosas de los hechos, de lo empírico y la experiencia, de lo que nos rodea y de lo que somos; en definitiva, podemos distinguir dos tipos de realidades, por una parte, la naturaleza o todo lo que nos circunda, y por otra, el ser humano, es decir, todo aquello relacionado con lo que somos nosotros mismos. Esta distinción es la que pertenece a la diferencia entre ciencias naturales y ciencias sociales.
Cada una de estas dos ciencias positivas tuvieron un desarrollo distinto y en diferentes momentos históricos. Fue en el barroco cuando las ciencias naturales tuvieron su asentamiento como ciencia moderna con un avance importante en el mundo de la física y de la cosmología; mientras las ciencias sociales se configuran como tales, en el siglo XIX con la aparición de la sociología, psicología... Esta juventud de las ciencias positivas, y en particular de las ciencias sociales, no es obstáculo para que ya tengan una solera y un asentamiento en la historia contemporánea del saber.
El objeto de estudio de las dos clases de ciencias positivas: naturaleza y hombre; les diferencia en sus fundamentos o bases epistemológicas. La naturaleza, por su parte, está sujeta al determinismo, a la relación necesaria entre causa-efecto que el físico, químico intenta desentrañar. Por otra parte la dificultad de las ciencias sociales y del ser humano es que el propio sujeto de conocimiento es, a su vez, el que se coloca en situación de ser estudiado; un objeto que, además, se define por su libertad e indeterminismo en sus acciones, pensamientos y en su ser mismo.
No es extraño que el producto de estas dos ciencias positivas sea distinto, en una se formularán leyes absolutas, en la otra sólo podrá hablarse de probabilidades o leyes probables.
Cuadro 1.3. Oposiciones entre las Ciencias Naturales y Sociales.
CIENCIAS NATURALES CC. SOCIALES Y HUMANAS
OBJETO o BASE La naturaleza El hombre
PRINCIPIO EPISTEMOLÓGICO Determinismo Indeterminismo (libertad)
METODOLOGÍA Cuantitativa Cuantitativa y cualitativa
PRODUCTO Leyes absolutas Leyes probabilísticas
EJEMPLOS Física, química... Sociología, Sicología...
Cuadro 1.4. Visión de conjunto de los saberes y sus subtipos.
S
A
B
E
R SABER
VULGAR
SABER
CIENTÍFICO CIENCIAS
NORMATIVAS
CIENCIAS
EMPÍRICAS CIENCIAS NATURALES
CIENCIAS SOCIALES
3.- NACIMIENTO Y OBJETO DE LA SOCIOLOGÍA: "EL HECHO SOCIAL"
3.1. Los orígenes de la Sociología.
La Sociología como disciplina autónoma desligada de la metafísica, la ética o la teología y comprometida con las exigencias del método científicos, nace a mediados del siglo XIX. Durante mucho tiempo, ha sido usual citar el nombre de Comte como fundador de la Sociología. Ciertamente, fue él el primero en utilizar el término sociología para sustituir su anterior expresión de física social.
Generalmente, las ciencias como los grandes descubrimientos, han surgido en la historia como resultado de un proceso complejo de interacción multicausal. El modo de pensar sociológico nació como fruto de un proceso y en el interior de un determinado contexto. Como cualquier acontecimiento histórico, es el resultado de múltiples causas. Y, en tanto que práctica intelectual, son muy diversos los razonamientos, argumentos, teorías, etc., que propiciaron su génesis.
Este contexto histórico en el que situamos el nacimiento de la Sociología viene marcado por un conjunto de factores que, en favor de la claridad expositiva, podemos agrupar en dos tipos: factores de orden intelectual-teórico, y factores de orden social y económico.
A) Factores de orden intelectual-teórico:
- El positivismo y las exigencias del método científico.
Si la sociología se distingue en algo de la anterior reflexión filosófica acerca de la sociedad, es en su intención de sujetarse a la disciplina del método científico y de la observación empírica de los hechos en el análisis de la sociedad. El método científico diseñado en el Renacimiento por hombres como Galileo y aplicado en primer término a la Física, había conducido a esta disciplina a un grado de desarrollo espectacular.
El propio Comte reconoce su admiración por este hecho y confiesa su intención de aplicar al estudio de la sociedad el mismo método que los físicos utilizan en el estudio de la naturaleza.
La aceptación consciente y sistemática de las exigencias del método científico en el estudio de la sociedad hasta el punto de hacer del ello su signo diferenciador respecto a la filosofía social, es inútil buscarlo con anterioridad al positivismo.
- El descubrimiento de la existencia de leyes sociales. A. Comte.
Pero la insistencia positivista en el método científico hubiera resultado estéril, de no incidir sobre una idea que se generaliza en el siglo XVIII: la sociedad, como la naturaleza, está sometida a un conjunto de leyes que regulan el devenir social y la historia. En el siglo XVIII nace la idea de que los fenómenos sociales poseen un carácter de regularidad y que por lo tanto están sometidos a leyes naturales más o menos análogas a las que gobiernan el universo físico: la elaboración de este concepto de leyes sociales, constituye un progreso decisivo, pues la ciencia tiene precisamente por fin, la investigación de dichas leyes por métodos experimentales. El mérito de A. Comte, que toma esta idea del siglo XVIII, reside en el hecho de haber sistematizado dicho principio y haber efectuado el primer análisis completo. La misión de la Sociología consiste, principalmente en descubrir estas leyes.
El propio Comte creyó haber descubierto una, en la formulación de la ley de los tres estados. El saber universal ha atravesado, a lo largo de su historia, tres etapas (estados): Estado teológico, metafísico, positivo.
Cuadro 1.5. La Ley de los Tres Estados (A. Comte)
TEOLÓGICO METAFÍSICO POSITIVO
Explicación sobrenatural
Ficticia
Sociedad militar
Infancia Explicación por entes
Abstracta
Sociedad legalista
Juventud Explicación real
Científica
Sociedad industrial
Madurez
- Autonomía de la sociedad civil.
Pero si preguntamos por qué ahora y no antes cuando nace la Sociología como aquí la entendemos. Habrá que referirse al hecho de que es en este siglo cuando aparece la idea de que la sociedad posee una realidad autónoma respecto a las instancias a las que tradicionalmente venía refiriéndose. La idea de sociedad civil como algo distinto y autónomo respecto a la Ciudad de Dios (religión) o al Estado (político), nace ahora como aportación e los filósofos de la Historia. Cuando la fuerza de las instancias a que venía siendo referida se resquebrajan (como consecuencia de las revoluciones), la sociedad se convierte en sí misma en objeto de estudio e investigación. En este punto, los filósofos de la historia como Hegel, juegan un papel importante.
- Las ideas evolucionistas.
Por último, las ideas evolucionistas jugaron también un papel fundamental en el nacimiento de la Sociología. H. Spencer otro de los padres fundadores junto A. Comte asimila el evolucionismo de Darwin. En concreto, según Spencer las sociedades han evolucionado, desde las sociedades simples a las compuestas:
1.6. Evolución social según H. Spencer
Familias------->------Clanes-------->-------Tribus-------->-------Estado
CARACTERÍSTICAS:
Simple----------->----------(ESTRUCTURA)------------>-----------Complejo
Generalidad---->-----------(FUNCIONES)-------------->-----------Especialidad
B) Factores sociales y políticos.
- La revolución industrial. (Económicos)
Hablar de los orígenes de la Sociología sin referirse a las transformaciones sociales, políticas y económicas que conmovieron a Europa como consecuencia de la revolución industrial primero, y de la revolución francesa después, resulta imposible. Los hechos son sobradamente conocidos. La industrialización significa un cambio radical en el modo de producción económica. La agricultura deja de ser la base fundamental en la economía de las naciones. La producción artesanal y la organización gremial del trabajo dan paso a un nuevo modo de producción basado en la industria, en la libertad de mercado y en la organización racional del trabajo. La riqueza de las naciones depende de la base productiva y no de la cantidad de dinero acumulado, como quería el mercantilismo.
Libre de toda suerte de ataduras que lastraron durante siglos la actividad económica (privilegios estamentales, organización gremial, etc.), la burguesía asumió el protagonismo en la dirección de la economía y se lanzó a la búsqueda del máximo beneficio mediante la organización libre del trabajo y la adopción creciente de nuevas tecnologías derivadas del desarrollo científico.
- El auge de los ideales democráticos. (Políticos)
Estos hechos no pudieron por menos de cuestionar radicalmente el viejo orden jurídico y político del ancien régime. La revolución francesa significó el final del orden estamental basado en los privilegios de la aristocracia y el clero. La burguesía se consolidó como clase social dominante y, aunque fuera de manera incipiente y, en gran medida, meramente formal, los ideales democráticos irrumpieron definitivamente en la teoría política.
- El capitalismo y la cuestión social. (Sociales). Pero la progresiva concentración de mano de obra en torno a los grandes centros fabriles, trajo consigo, necesariamente, la aparición de una nueva clase social: el proletariado. La organización libre del trabajo, significó en la práctica, la ausencia de toda regulación en las relaciones laborales y empobrecimiento progresivo de las masas obreras como consecuencia de los salarios de miseria con los que el capital buscó incrementar la plusvalía. Pronto esta nueva clase social se organizó en sindicatos y partidos revolucionarios y Europa se vio envuelta en un clima de conflictividad social y política sin precedentes. La cuestión social fue uno de los factores decisivos en el complejo multicausal a que antes aludíamos, como responsable del nacimiento de la sociología.
3.2. El objeto de la Sociología.
En relación con otras disciplinas científicas, la Sociología se encuentra en una situación desconcertante: su primera tarea, y justamente la más difícil, consiste en decir cuál es su objeto de estudio. Existen profesionales de la Sociología, Facultades de Sociología, revistas y publicaciones dedicadas a la sociología y se celebran Congresos Internacionales de Sociología. Sin embargo, aún hoy, los sociólogos no han logrado ponerse de acuerdo acerca de qué debe entenderse por Sociología, cuál es su campo propio de estudio o cuáles son los límites precisos que la diferencian de otras ciencias sociales, como la Antropología, la Historia o la Psicología Social.
Razones de la dificultad en la determinación del objeto.
A) Coincidencia del sujeto y el objeto en la investigación sociológica.
Es cierto que no faltan razones para explicar este desacuerdo. En general cualquier ciencia en la que el hombre sea, al mismo tiempo, sujeto y objeto de investigación, tendrá un margen de indefinición y prejuicios distorsionan inevitablemente el análisis de un objeto -el hombre-, que ya en sí mismo se caracteriza por su infinita plasticidad e inestabilidad. Se trata por tanto, de una ciencia inmersa en su propio objeto el cual por sí mismo, es un objeto inacabado y cambiante.
B) El análisis social y el sentido común.
Por otra parte, el sociólogo pretende analizar científicamente hechos y acontecimientos acerca de los que, por su especial proximidad, todo el mundo cree saber algo. Con frecuencia, estas conclusiones de sentido común están tan fuertemente arraigadas, que resulta difícil, incluso para el sociólogo, sustraerse a ellas y, en ocasiones, distorsionan el análisis sociológico.
Si sus conclusiones están de acuerdo con el sentido común, la Sociología será simplemente, una ciencia de lo obvio que justifica mediante una enorme parafernalia científica (encuestas, estadísticas, muestreos, etc.) Lo que todo el mundo sabe. Si, por el contrario, sus conclusiones contradicen el sentido común, probablemente se le mirará con recelo por cuestionar lo evidente y defender posturas absurdas o peligrosas.
C) Imprecisión en los límites con las demás ciencias sociales.
La imprecisión en los límites con el resto de las ciencias sociales es otra de las fuentes de indefinición. La Sociología comparte objeto con las demás ciencias sociales. Todas ellas estudian la sociedad desde diferentes puntos de vista.
Sus primeros representantes la consideraron como la ciencia síntesis en la que debían converger todas las demás ciencias sociales particulares. Su carácter enciclopédico les autorizó a ofrecer grandes visiones generales de la Sociedad y de la Historia. En este empeño encontraron la razón de ser de la Sociología y justificaron el punto de vista de su objeto.
En la actualidad, los sociólogos (o al menos la mayoría) han renunciado a este intento de ofrecer grandes teorías omnicomprensivas de la Sociedad y la Historia en general. Aun reconociendo su carácter sugestivo y estimulante, estas grandes teorías no son susceptibles de verificación empírica y, por consiguiente, no pueden ser consideradas teorías científicas. Con ello, la Sociología ha perdido su dimensión de ciencia-síntesis, que cierra el edificio de las ciencias sociales; renunciando a la posición de privilegio en que la colocaron los primeros fundadores. Es lógico que este proceso trajera como consecuencia la pregunta por el objeto de la Sociología.
D) Inmadurez de la ciencia.
Por último, algunos autores atribuyen el problema simplemente a una presunta inmadurez de la ciencia. En su corta historia (apenas siglo y medio), la Sociología no habría conseguido elaborar aún un cuerpo teórico suficientemente contrastado y seguro. La imprecisión y el desacuerdo en la utilización de términos y conceptos, sería una consecuencia de esta situación.
3.3. El objeto de la sociología: Los hechos sociales según Durkheim.
En el siglo XIX, los padres de la Sociología, Saint-Simón, Comte, o Marx... no supieron dar una respuesta clara a la pregunta de cuál es el objeto de esta ciencia que estaba naciendo. Comte convirtió a la Sociología como al positivismo en una religión, con su catecismo y sus normas morales; también Marx derivó la Sociología en una mera ideología que defendía intereses particulares de clases y de opciones políticas y de proyectos de sociedad distinta.
Habrá que esperar a Durkheim (1864-1920) para que exista una verdadera respuesta a la pregunta del objeto de la sociología, y es por eso que sería a él al que habría que atribuir la auténtica paternidad de la sociología como ciencia positiva.
El objeto de la sociología, lo que la configura y define es el estudio de los hechos sociales. ¿Y, qué son los hechos sociales para Durkheim?. Antes de nada habría que decir lo que no son los hechos sociales, es decir, acercarnos por la vertiente de la definición negativa a este concepto clave en la sociología durkheimiana, para luego definirla positivamente.
A) Lo que no son los hechos sociales:
- No son los fenómenos físicos,
- No son procesos orgánicos.
- No son tampoco los fenómenos psíquicos.
- No son fruto de individuos o mejor dicho de individualidades.
B) Lo que son los hechos sociales.
- Son las formas de actuar, pensar y sentir que son objetivas y externas al individuo, que tienen un poder de coacción, por el que se imponen al mismo individuo quiera o no quiera.
- Son fruto de la acción múltiple y simultánea de individuos, son por tanto modelos colectivos preexistentes que se nos imponen, elaborados por generaciones pretéritas.
- Son el sustrato social, es decir ese conjunto de modelos colectivos configura lo que Durkheim llama la conciencia colectiva.
- Suelen formularse de manera oral o por escrito, como normas que se transmiten por la educación (aforismos, leyes morales, jurídicas...); quedándose fijadas en obras objetivas (estilos de arte, culturas, modas, etc.)
- Aunque, en parte modificables por nuevas acciones individuales, ofrecen resistencia al cambio.
4.- DEFINICIÓN Y OBJETO DE LA SOCIOLOGÍA DE LA EDUCACIÓN
4.1. Sociología de la Educación: definición y delimitación.
Hay una serie de términos que han venido empleándose a lo largo del siglo XX, que conviene aclarar, si bien no siempre las designaciones de las obras coinciden con el contenido. Asimismo, designaciones diferentes encierran a veces contenidos similares. Sociología de la Educación, Pedagogía social, Sociología educativa y otras disciplinas que contemplan las diversas relaciones de la sociedad y la educación con metodología y objetivos diferentes.
a) Sociología de la Educación. Es una disciplina que utiliza los conceptos, modelos y teorías de la Sociología para entender la educación en su dimensión social. Ha sido cultivada por los sociólogos que han tenido un interés creciente por la educación y por los pedagogos que han pasado de recurrir casi exclusivamente a la Psicología, a un equilibrio entre ésta y la Sociología.
b) Pedagogía social. Es una disciplina pedagógica. Su objetivo es la educación social del hombre. Lo que importa es convertirle en un ser social capaz de integrarse en el medio, de participar activa y responsablemente y en su caso de mejorarlo. Hoy cobra interés especial al considerar la reeducación y la resocialización de todo tipo de marginados sociales.
c) Sociología educativa. Aunque ha arrancado de los social como la condición y el objetivo, sin embargo su intención ha sido fundamentalmente educativa: perfeccionar la conducta del hombre como ser social y a su vez la mejora de la sociedad.
Cuadro 1.7. Disciplinas relacionadas con la educación y su distinción
SOCIOLOGÍA DE LA EDUCACIÓN PEDAGOGÍA SOCIAL SOCIOLOGÍA EDUCATIVA
DISCIPLINA Sociología Pedagogía Moral
FIN Explicar Socializar Perfeccionar
AUTORES Durkheim
(1858-1917) Nartop
(1854-1924) Dewey
(1859-1952)
PRECEDENTE Sociología Francesa Idealismo Alemán Pragmatismo EE.UU.
4.2. La Sociología de la Educación como ciencia
Para terminar de delimitar la Sociología de la Educación se exponen a continuación una serie de características propias de esta ciencia:
a) Es una Sociología especial. Es decir, es una de las ciencias sociológicas (como también la Sociología de la Familia, la Sociología del Trabajo, la Sociología de la religión...) que se ocupan de alguno de los aspectos concretos de lo social. En este sentido es una rama de la Sociología General, coordinada con las otras Sociologías especiales mencionadas.
b) Es una Ciencia de la educación, en tanto que tiene como objeto de estudio la educación. Esto no significa que sea una ciencia pedagógica, ni que pertenezca a la Pedagogía, sino que es una ciencia sociológica que pertenece a la Sociología.
c) Es una Disciplina explicativa y descriptiva esencialmente, frente a otras que pretende o tienen por objetivo principal intervenir en el proceso educativo. Esta afirmación que opone la Sociología de la Educación con las Didácticas y Psicología de la Educación, no quita que la Sociología de la Educación posea un carácter provocador y crítico que provoque y oriente con sus resultados cambios y transformaciones.
Por último, su especialista o profesional típico y ordinario es el sociólogo.
BIBLIOGRAFÍA.
ANDER-EGG, E. (1965), Técnicas de investigación social, Humanitas, México.
GIL VILLA, F. (1994), Teoría Sociológica de la Educación, Amaru Ediciones, Salamanca.
GONZÁLEZ RÍO, M. J. (1997), Metodología de la investigación social, Aguaclara, Alicante.
GUERRERO SERÓN, A. (1996), Manual de Sociología de la Educación, Editorial Síntesis, Madrid.
MORALES NAVARRO, J. y ABAD MÁRQUEZ, L.V. (1992), Introducción a la sociología, Tecnos, Madrid
PICÓ, J. y SANCHIS, E. (1996) Sociología y Sociedad, Tecnos, Madrid.
QUINTANA CABANAS, J.M. (1993), Sociología de la Educación, Dykinson, Madrid.
NATURALEZA DE LA SOCIOLOGÍA
1.- Determinantes biológicos y sociales de la personalidad: La cultura
2.- El proceso de socialización
3.- Agentes de socialización
1.- DETERMINANTES BIOLÓGICOS Y SOCIALES DE LA PERSONALIDAD: LA CULTURA.
1.1. Naturaleza o cultura.
¿De qué depende el individuo, cómo se configura nuestra personalidad? ¿A partir de nuestra genética o del medio/entorno social? ¿Qué somos herencia o ambiente? ¿Naturaleza o Cultura?.
El problema está en saber hasta qué punto esas circunstancias llegan a configurar la personalidad individual. En esto no todos los autores coinciden, sino que algunos proponen incluso soluciones extremas, exclusivistas y opuestas a otra. Cabría hacer tres grupos:
- Los que opinan que todo el desarrollo personal depende de factores constitucionales, hereditarios y congénitos (de orden biológico y psicológico, como los cromosomas y el temperamento).
- Los que piensan que esos factores no cuentan en absoluto, de tal modo que sólo intervienen causas ambientales, que obran de un modo decisivo.
- Por último, hay quienes admiten la influencia conjunta de la herencia y del medio social.
A) Los autores del primer grupo son más bien escasos. Entre ellos es clásico F. Galton, para quién las facultades mentales y artísticas son heredadas, según le mostraba el estudio de los mellizos; con eso contribuyó a inaugurar el movimiento de la eugenesia. Igualmente K. Pearson (1909) piensa que los factores biológicos dominan la evolución del género humano; estos y sólo estos, pueden dar luz sobre el nacimiento y caída de las naciones, sobre el progreso racial y la degeneración nacional.
B) Más frecuente que la posición anterior es la que, colocándose en sus antípodas y extremando igualmente sus tesis, sostiene que todo el desarrollo de la personalidad, viene condicionado por las circunstancias sociales entre las cuales se efectúa. Según J. Mill, toda la diferencia existente, o que pueda llegar a existir, entre una clase de hombres y otra, se debe enteramente a la educación.
En esas mismas ideas abunda el sociologicismo. Sus fundadores Durkheim y Nartop afirmaron que, si bien la naturaleza nos hace individuos, sólo la sociedad nos hace personas, ya que exclusivamente de la sociedad recibe el individuo todo lo que constituye su mundo espiritual: lenguaje, sentimientos, cultura, religión, arte, etc. Llamando educación, de un modo global, a todo ese bagaje con el que la sociedad (de forma impositiva) equipa a sus nuevos miembros y así los socializa, nos sale la conocida frase -idéntica en ambos autores- de que el hombre es hombre sólo porque vive en sociedad y es educado en ella.
La Sociología insiste en que la personalidad así definida no es innata, sino adquirida o lograda con el tiempo está determinada por el poder condicionante de la herencia cultural y por los modelos sociales de comportamiento que los grupos crean, aprueban, defienden y transmiten a la siguiente generación. Así el sociólogo ve la personalidad como un reflejo de las situaciones sociales en medio de las cuales el individuo se ha formado y ante las cuales reacciona. El self, la esencia personal (el sí mismo, el Yo), es un espejo social.
C) Cuando dos soluciones extremas se oponen y excluyen entre sí cabe la sospecha fundada de que ambas contengan parte de verdad, con lo cual la solución auténtica sería la que trate de conciliar ambos extremos, adoptando una postura de término medio que intente explicar el fenómeno a partir de los dos principios antinómicos propuestos en aquella tesis. Tal ocurre cuando, constatados los determinantes biológicos de la personalidad por su lado y condicionantes sociales por otro, concluimos que ambos deben de actuar a la vez, aunque sea en proporciones diversas. El carácter complejo de los fenómenos vitales nos invita también a esta solución.
En suma, como dice A.K.C. Ottaway, hay siempre una interacción entre factores innatos y culturales, y cualquier determinismo total es improbable. La antigua oposición entre naturaleza y educación (nature y nurture) es un error, puesto que ambas son necesarias y están en inevitable interacción.
Cuadro 2.1. Enfoques sobre la relación entre cultura y naturaleza
GENETISTAS AMBIENTALISTAS SINTÉTICOS
La personalidad en los genes La personalidad en el ambiente social La personalidad parte herencia y ambiente.
F. Galton. E. Durkheim. Quintana Cabanas.
Determinismo biológico Determinismo sociológico Acción conjunta.
1.2. ¿Qué es la cultura?
Es evidente que cultura, que en último término es una palabra latina comenzó teniendo un sentido atributivo, funcional: cultivo de algo, agricultura, o cultura animi que para Cicerón es como sinónimo de filosofía. Es decir, en principio la cultura es un proceso, el paso de inculto a culto a través de un ejercicio más o menos metódico, la educación (pero al mismo tiempo, educar es sacar algo de dentro de un mismo, algo que ya estaba allí; desarrollar una capacidad). En todo caso, más adelante, cultura adquiere carácter sustantivo; desde el Renacimiento ya será sobre todo el resultado de un proceso más que el proceso mismo, los frutos más que el cultivo.
La clásica definición de cultura dada por Tylor tiempo ha es un tanto vaga, pero fácil de entender: cultura es, según él, "un complejo que comprende conocimiento, creencias, arte, moral, leyes, usos y otras capacidades y usanzas adquiridas por el hombre en cuanto es miembro de una sociedad".
La cultura puede ser entendida como un sistema relativamente integrado de ideas, valores, actitudes, aserciones éticas y modos de vida, dispuestos en esquemas o patrones que poseen una cierta estabilidad dentro de una sociedad dada, de modo que influyen en su conducta y estructura. Todo aquello que el hombre y hace y que no procede únicamente de su herencia biológica queda, pues, cubierto por el campo de la cultura.
Básicamente la cultura consiste en contenidos de conocimiento y pautas de conducta que han sido socialmente aprendidos. La cultura, pues, requiere un proceso de aprendizaje, el cual es social, lo que no sólo quiere decir que nace de la interacción social, sino que la cultura consiste en patrones comunes a una colectividad. Estos patrones o pautas, no obstante, son abstractos la cultura se manifiesta en conductas concretas y en sus resultados, los cuales no son, en sí mismos cultura.
1.3. Elementos de la cultura.
La cultura tiene los siguientes elementos: los aspectos cognitivos, las creencias, los valores, las normas, los signos y los modos no normativos de conducta.
a) Toda cultura posee unos elementos cognitivos, es decir, un grado elevado de conocimientos objetivos sobre la naturaleza y la sociedad. De otro modo la colectividad no podría sobrevivir: desde los pueblos más primitivos a los más avanzados en complejidad cultural todos saben enfrentarse con la brega cotidiana, sean las que sean las creencias mágicas, religiosas, ideológicas y no objetivas.
b) Junto a estos sólidos elementos cognitivos están las creencias, de las cuales no afirmamos su verdad ni falsedad, pues son empíricamente incomprobables; las creencias son una fe sobre el cosmos y la vida, y se manifiestan también en acciones y resultados, sobre todo, la religión. Conviene señalar que existe un grado muy elevado de superimposición entre lo cognitivo y lo credencial, y que la distinción es puramente analítica. Así creer es también un modo de conocer la realidad, por muy falsas que sean las creencias de unos hombres según la opinión de otros hombres. En todo caso, el conocimiento perfecto no existe: poseemos sólo aproximaciones, más o menos profundas, a la verdad.
c) Por su parte los valores con que nos acercamos a la realidad y las normas de conducta que los enmarcan determinan nuestras actitudes. Puede decirse que los valores son juicios de deseabilidad o aceptabilidad, o de rechazo, que se atribuyen a toda clase de objetos y hechos. Los valores conllevan actitudes que superponemos a fenómenos dados, y que deben ser distinguidos cuidadosamente de los fenómenos mismos. Pronto se comprende que los valores no pueden manifestarse sin normas de conducta que los enmarquen y que tienen que ser aceptados por un número mínimo de miembros de la colectividad, y en muchos casos por todos. La desviación del valor y de la norma establecida suele implicar una reacción punitiva por parte de la colectividad en cuestión, aunque muchas sociedades complejas hayan institucionalizado un buen número de divergencias en un sistema de tolerancias aceptables.
d) Los signos culturales incluyen señales y símbolos. Los primeros indican un hecho, simplemente, como es el caso de las señales de tránsito. Los símbolos son más complejos y son parte central del sistema de comunicación que es la cultura. La red simbólica más importante es el lenguaje; sin él la estructura social se desvanecería. La sociedad humana es inconcebible sin lenguaje. Para estudiarlo desde el ángulo de mira de la sociología se ha desarrollado la disciplina de la sociolingüística, que introduce criterios demográficos, migratorios, ideológicos y políticos en la investigación de los datos referentes al lenguaje humano.
e) Finalmente, tenemos las formas de conducta no normativas, como son el estilo peculiar de las gentes de una comunidad nacional (Idiosincrasia).
2.- EL PROCESO DE SOCIALIZACIÓN. (Enculturación, culturalización o crianza).
2.1. Definición. ¿Qué es la socialización?
La socialización es el proceso mediante el cual el individuo es absorbido por la cultura de su sociedad. En su transcurso el individuo, ha escrito Child, "nacido con una gama de comportamiento potencial muy amplia, es conducido a desarrollar un comportamiento con límites más restringidos, consistentes en lo que es habitual y aceptable con arreglo a normas de su grupo".
a) Fundamentalmente, la socialización es un aprendizaje; en su virtud el individuo aprende a adaptarse a sus grupos, y a sus normas, imágenes y valores. Trátase de un proceso de aprendizaje de conducta. Como proceso es permanente, pues dura toda la vida del individuo y es perenne en la sociedad. Para el individuo la socialización es particularmente intensa durante sus primeros años.
b) El tema de la interiorización y transmisión de la cultura es vasto y debe ser enfocado interdisciplinarmente, con ayuda de la psicología social, la sociología, la antropología, la ciencia política. Cuando nos adentramos en él nos encontramos con uno de los mejores ejemplos de la unidad e interdependencia íntima de las ciencias sociales. Aprendizaje e interiorización dan como resultado la adaptación del individuo al grupo y, por consecuencia, la conformidad y la cohesión e integración social.
2.2. Tipos: socialización primaria y secundaria. ¿Cómo se desarrolla?
La principal distinción es entre socialización primaria y secundaria. Para Berger y Luckmann el individuo no nace miembro de una sociedad, sino que nace con una predisposición hacia la sociedad, y luego llega a ser miembro de una sociedad. En este contexto se sitúa la mencionada distinción. La socialización primaria es la primera por la que el individuo atraviesa en la niñez por medio de la cual se convierte en miembro de la sociedad. La socialización secundaria se refiere a cualquier proceso posterior que induce al individuo ya socializado a nuevos sectores del mundo objetivo de la sociedad.
a) La socialización primaria es decisiva y no sólo por la plasticidad, sensibilidad y dependencia en que se encuentra el niño. El niño no internaliza como el mundo posible, sino que lo internaliza como el mundo, el único que existe y se puede concebir. Por ello el mundo internalizado en la socialización primaria se implanta en la conciencia con mucha más firmeza que los mundos internalizados durante la socialización secundaria. Esto significa que la socialización primaria comporta algo más que un aprendizaje puramente cognoscitivo. Requiere la adhesión emocional a los otros significantes. Es así como el niño acepta los roles y actitudes de los otros significantes, los internaliza y se apropia de ellos, siendo entonces capaz de identificarse a sí mismo. La socialización primaria finaliza cuando el concepto del otro generalizado, y todo lo que comporta se ha establecido en la conciencia del individuo. Ya es miembro efectivo de la sociedad y está en posesión subjetiva de un yo y un mundo. Aquí cuenta la carga emocional.
b) La socialización secundaria consiste en el conjunto de procesos mediante los cuales el individuo internaliza submundos específicos. Posiblemente en sociedades primitivas, que cuentan con gran homogeneidad cultural y estabilidad, la socialización secundaria alcance poca relevancia. Pero éste no es el caso de sociedades complejas, con gran división del trabajo y distribución social de conocimiento. Se suele producir la socialización en contextos institucionales. Estos submundos son generalmente realidades parciales, que contrastan con el mundo base adquirido en la socialización primaria. Presupone un proceso previo de socialización primaria, pues debe tratar con un yo formado con anterioridad y con un mundo ya internalizado. Por otro lado mientras que la socialización primaria no puede efectuarse sin una identificación con carga emocional, la mayor parte de la socialización secundaria puede prescindir de esta clase de identificación.
Cuadro 2.2. Distinción entre Socialización Primaria y Socialización Secundaria
SOCIALIZACIÓN PRIMARIA SOCIALIZACIÓN SECUNDARIA
ETAPA CRONOLÓGICA Infancia Madurez
INTERNALIZACIÓN Fuerte Débil
ADHESIÓN EMOCIONAL Imprescindible Prescindible
TOMA CONCIENCIA Mundo social/total Submundo social/parcial
TIPO DE SOCIEDAD Primitiva y simple Moderna y compleja
Otra noción importante es la resocialización. Tiene más semejanza con la socialización primaria, aunque se realice durante la fase adulta del individuo. Pretende la sustitución de la socialización anteriormente recibida por el individuo. Si en la socialización secundaria el presente se interpreta de modo que se halle en relación continua con el pasado, con tendencia a minimizar las transformaciones que se hayan efectuado realmente, no ocurre igual en la resocialización. En ésta el pasado se interpreta con la realidad presente, con tendencia a proyectar al pasado diversos elementos que, en ese entonces, no estaban subjetivamente disponibles.
La resocialización comporta, por consiguiente, un cambio básico y rápido del pasado. El ejemplo más conocido y estudiado se refiere a la delincuencia, especialmente juvenil. Pero no siempre la resocialización no aprobada por al sociedad. Casos como la emigración a otras áreas culturales o el divorcio también lo requieren. En todo caso la resocialización es difícil de efectuarse, pues, en cierta medida, exige reproducir las condiciones de la socialización primaria pero en la época adulta. Por ello alguna de las siguientes condiciones indicadas deben producirse:
- Control total sobre el individuo.
- Supresión de status pasados.
- Negación del valor moral del viejo yo.
- Participación del individuo en su propia resocialización.
- Sanciones extremas.
- Intensificación de las presiones y apoyo del grupo de iguales.
Otro concepto importante, acuñado por Merton, alude al grupo según el cual el individuo se socializa. Se trata de la socialización anticipatoria. Es una forma de socialización que tiene lugar cuando los individuos adoptan como grupo de referencia un grupo al que no pertenecen, pero aspiran a pertenecer en el futuro, socializándose de acuerdo con lo que perciben de sus normas antes de haberse incorporado a él. Por tanto, amplia el concepto conocido ya de antiguo de la determinación grupal de la conducta. Pues bien, la socialización anticipatoria, al adoptar el individuo los valores de un grupo al cual no pertenece, puede servir a la doble función de ayudar a su elevación dentro de ese grupo y de facilitar su adaptación una vez que ha llegado a formar parte de él. El propio Merton subraya la importancia de la socialización anticipatoria en los procesos de movilización social y la diversidad de consecuencias que puede suscitar. Consecuencias que pueden ser diferentes para los individuos que la manifiestan, los grupos a que pertenecen y la estructura social más amplia. Así para el individuo la socialización anticipatoria es funcional sólo dentro de una estructura social relativamente abierta.
En definitiva, lo que aprende en el proceso de socialización es la cultura, es decir, un complejo conjunto de pautas de comportamiento recurrentes que le permiten saber a qué atenerse en cada situación, qué debe esperar de los demás, cómo debe reaccionar en cada caso concreto y qué pueden esperar los demás de él. Los nuevos miembros de la sociedad aprenden cómo deben actuar, o qué consecuencias pueden razonablemente derivarse si deciden desviarse de las pautas establecidas por el grupo. Este aprendizaje es esencial para la pervivencia de la sociedad.
Pero estas normas y pautas de comportamiento que el individuo aprende en el proceso de socialización no están aisladas y sin conexión entre sí, sino que forman complejos a los que llamaremos papeles sociales (roles) y que corresponden a las distintas posiciones (status) que los individuos pueden ocupar en sus relaciones sociales.
2.3. Concepto del rol y status. ¿Qué contenidos tiene?
a) La sociedad no es simplemente un conglomerado accidental y desordenado de seres humanos. Es un sistema estructurado en el que cada individuo ocupa una posición (status) definida. Se entiende por status social el puesto que cada individuo ocupa en la estructura social, tal como lo evalúa la propia sociedad. Una misma persona ocupa diferentes status en función del contexto en que se relacione o del grupo desde el que se defina.
b) A cada status le corresponde un repertorio de pautas y normas de comportamiento que prescriben, a la persona que lo ocupa, cómo deberá actuar en cada situación y lo que los demás pueden razonablemente esperar que haga en virtud del lugar que ocupa. Llamamos papel (rol), al conjunto de todas estas pautas de comportamiento asociadas a cada status. La importancia de los papeles sociales radica, no sólo en el grado en que regulan la conducta, sino también en el hecho de que permiten a los hombres predecir los actos de los demás, y determinar, por tanto, sus propios actos de acuerdo con aquellos. En consecuencia, las relaciones sociales existen entre los papeles desempeñados por los miembros de una sociedad.
En todo caso, los conceptos de status y rol son dos herramientas fundamentales en el análisis del comportamiento social que, como vemos, están íntimamente relacionados entre sí. Se trata de dos caras de una misma moneda. A un status se le asocia siempre un conjunto de roles y, por su parte, un rol lo es siempre del status del que deriva. El status se ocupa, los roles se desempeñan. Esta es la razón por la que algunos sociólogos asocian los status a los aspectos estáticos del sistema social, y los roles a los aspectos dinámicos. Así, status se relaciona con la estructura de la sociedad, y roles con la función:
Cuadro 2.3. Oposición entre Status y Rol
S T A T U S R O L
Posición social Papeles sociales
Se ocupa Se desempeñan
Estructura social Función social.
Valorativo (valor):
- Prestigio.
- Dignidad.
- Categoría. Normativo (deber de):
- Pensar.
- Decir.
- Actuar.
Estática social. Dinámica social.
2.4. Tipos de status.
Entre esa multiplicidad de status, algunos tienen un fundamento biológico. En todas las culturas, la edad o el sexo determinan alguna de las posiciones que pueden ocuparse. Pero la mayoría de ellos surgen del proceso mismo de la vida colectiva, de sus actividades económicas, políticas o religiosas. Una forma común de clasificar los status consiste en distinguir entre adscritos y adquiridos.
- Un status adscrito deriva de factores sobre los que el individuo carece de control y, por tanto, es independiente de su voluntad. El status de hijo o el de heredero a la corona pertenecen a esta clase.
- Por el contrario, el status adquirido depende de acciones positivas y, en ocasiones, del esfuerzo del propio interesado por alcanzarlo: los status de esposo, profesor, líder sindical...
En la medida en que la estructura del grupo está formada por el conjunto de status que lo integran, cada persona ocupa, al menos, tantos status como grupos a los que pertenece. Sin embargo, existe siempre uno que es el status clave porque identifica al individuo socialmente y le sitúa en la estructura social. La determinación de cuál sea ese status principal depende de la forma en que cada sociedad valore las distintas actividades institucionales. En una sociedad en la que la mayoría de las actividades se organizan en torno a las relaciones de parentesco, el status familiar ocupa el lugar preeminente. En la nuestra, en la que se concede una fuerte valoración al éxito económico, el status dominante suele ser el profesional. La profesión es; generalmente, el criterio fundamental en la valoración de la personalidad social.
3.- LOS AGENTES DE SOCIALIZACIÓN.
3.1. Enumeración de los agentes de socialización más importantes.
En sentido amplio, todos somos agentes de socialización. Medios informales difusos, en sociedades estables y sencillas, pueden resultar lo suficientemente eficaces para lograr la socialización de los nuevos miembros de la sociedad. Pero en sociedades complejas, heterogéneas y con grandes ritmos de cambio social, no basta con la socialización informal. La herencia cultural del grupo cuenta con demasiada complejidad para lograrse con procedimientos tan espontáneos. Agencias de socialización se emplea para referirse a las instancias o vías, mediante las cuales se efectúa la transmisión de conocimientos, valores, etc. Agencias que son múltiples y pueden, en teoría, reforzar sus efectos, pero también provocar discontinuidades y problemas generacionales en el proceso de socialización. En concreto la familia, el grupo de iguales, escuelas, las asociaciones de todo tipo y los medios de comunicación de masas constituyen las principales agencias de socialización.
* La familia socializa al niño, pero no crea los valores que le inculca.
Estos valores pueden tener y de hecho tienen las más diversas procedencias: la religión, la clase social, la nación, etc. Por esto, la familia transmite valores creados fuera de ella, es un simple agente transmisor. Davis señala la importancia de la familia en la socialización en los siguientes puntos:
i. La familia es la primera agencia que recibe al niño y en ella se inicia el proceso.
ii. La influencia de la familia es profunda también porque es el elemento persistente.
iii. Es el grupo más íntimo que actúa en la socialización.
iv. Está vinculada a la satisfacción de necesidades materiales y espirituales.
v. Proporciona relaciones autoritarias e igualitarias.
vi. La comunidad general identifica a los miembros de la familia entre sí.
* Como la familia, otros grupos primarios intervienen en el proceso de socialización. Se trata de los llamados grupos de iguales, en los cuales las relaciones son también íntimas y cara a cara.
Concretamente en la infancia, el grupo de iguales ayuda a introducir en sus miembros la noción de autoridad informal y, por tanto, a desarrollar una idea diferente de la estructura de mando con relación a la familia. Al analizar el papel de desempeña como filtro entre los medios de comunicación de masas y los receptores de la misma. Riesman en "La muchedumbre solitaria" quien ha destacado su importancia. Sostiene que el grupo de iguales está convirtiéndose en la más importante agencia de socialización. Distingue, en efecto, tres tipos de carácter social que denomina dirigidos por la tradición, el de dirección interna y el de dirigidos por otros:
* Dentro de los grupos secundarias destaca en especial el sistema educativo ya que constituye el ámbito formal para la transmisión cultural entre generaciones.
La socialización se efectúa en el contexto y con medios y órganos especiales. En ella actúan, además, grupos e iguales que, como se ha visto, interviene también en el proceso de socialización. Su influjo se filtra a través de múltiples vías, según Carlos Alba:
i. El currículum. A través de las asignaturas impuestas, el contenido de los programas y libros de textos.
ii. Junto al anterior, el conjunto de actos que constituyen los ritos de la escuela suponen igualmente un importante instrumento de socialización. La escuela será el primer ámbito donde los individuos experimentará la competitividad, la necesidad de productividad y rendimiento, ritmos horarios y secuencias fijos e impuestos.
iii. El propio profesor. Constituye un modelo de autoridad, apoyado en conocimientos específicos, y son quienes en definitiva transmiten unos valores determinados. No en vano todos los sistemas políticos procuran controlar cuidadosamente la selección de individuos que van a desempeñar este papel.
* Los medios de comunicación de masas.
Proporcionan informaciones juicios sobre acontecimientos, ofrecen modelos de comportamiento y, además, sus contenidos repercuten en un volumen de población superior al de cualquier otra agencia. Hasta tal punto son importantes en el proceso de socialización que pueden distinguirse dos épocas, antes y después de la aparición y difusión de estos medios, principalmente la televisión.
3.2. Clasificación de los agentes de socialización.
Mejor aún que una simple enumeración en un pseudo orden de importancia, será el intento de clasificar esos agentes de acuerdo con tres criterios:
a) Cabe clasificar los agentes de socialización según tengan por objetivo explícito y reconocido formar, educar, inculcar unos principios, dispensar unos conocimientos; o, por el contrario, según que los agentes socializadores ejerzan esa función de un modo solamente instrumental, con miras a otras actividades o a otros fines como objetivo explícitos.
b) Se pueden clasificar distinguiendo por formar grupos de edad heterogéneos, o por constituir grupos de edad homogéneos. Habría que completar, sin embargo, la distinción propuesta por Eisenstadt, añadiendo que ciertos grupos o instituciones pueden también caracterizarse simultáneamente por la homogeneidad y la heterogeneidad de las edades.
c) Otro criterio de clasificación sería distinguir entre grupos primarios y secundarios combinados con el criterio anterior que consistía en distinguir aquellos agentes que tienen como finalidad específica justamente la socialización, y aquellos otros que contribuyen también, aunque sin tenerlo como finalidad propia, a socializar a sus miembros. (En 1909 Charles H. Cooley elaboró el concepto de grupo primario. Según Cooley el grupo primario se caracteriza por el reducido número de miembros que lo integran, lo que permite unas relaciones cara a cara face to face entre todos sus miembros. En el grupo primario todos los miembros se conocen personalmente y mantiene relaciones directa, este hecho, unido a un clima afectivo generalmente intenso, hacen posible la expresión libre, relativamente, y espontánea de las personalidades de sus miembros. Los grupos secundarios se oponen a estas características).
Cuadro 2.4. Comparación entre grupos primarios y secundarios.
GRUPO PRIMARIO GRUPO SECUNDARIO
Nº pequeño de miembros Nº grande de miembros
Relaciones:
- Personales (face to face)
- Directas
- Entre todos Relaciones:
- Impersonales.
- Indirectas
- Entre algunos
Clima afectivo Clima aséptico
Libre expresión de personalidad No hay expresión de personalidad
Ejemplos:
(Familia. Pandillas...) Ejemplos:
(Grandes empresas, Sindicatos...)
BIBLIOGRAFÍA
ROCHER, G. (1975), Introducción a la sociología general, Herder, Barcelona.
MORALES NAVARRO, J. y ABAD MÁRQUEZ, L.V. (1996), Introducción a la sociología, Tecnos, Madrid.
CRONOGRAMA DE ACTIVIDADES SOCIOLOGÍA RURAL
Instituto Pedagógico Rural “El Mácaro”
Profesora: Soc. Arlen Salazar
SOCIOLOGÍA RURAL
CRONOGRAMA DE CLASES
26 al 30 de Abril Presentación de la materia. Diseño y discusión del plan de evaluación.
Normas de trabajo en el aula.
03 al 08 de mayo La Sociología como ciencia, método e instrumentos.
La Sociología Rural, objeto y método de estudio.
Conceptos Básicos del Medio Rural y Educación
Lectura: Los Espacios rurales. / Medio Rural y Sociología rural (Conceptos básicos)
10 22 de mayo El Método Etnográfico e Historias de Vidas y la construcción de sus
instrumentos.
Taller grupal 15%
24 al 29 de mayo Discusión taller grupal método etnográfico
Prueba escrita. 15% (45 min)
31 may 05 Jun Historia y Evolución del espacio agrario en Venezuela
Análisis de Lectura. 1 (5%)
07 al 12 de jun Desarrollo Rural. Apuntes para la discusión de Desarrollo Rural en
Venezuela
Análisis de Lectura 2 (5%)
14 al 19 de jun Disonancias epistemológicas en Educación Rural en Venezuela
Análisis de Lectura 3 (5%)
21 al 26 de jun La Dinámica actual de los territorios rurales en América Latina
Análisis de lectura 4 (5%)
28 jun al 03 de jul Globalización y nueva ruralidad en América Latina.
Análisis de lectura 5 (5%)
06 al 10 de jul Nuevas perspectivas del desarrollo rural en Venezuela
Análisis de lectura 6
12 al 17 de jul Entrega trabajos de campo Prueba Tipo Ensayo (15%)
13 19 al 24 de jul Presentación de trabajos de campo
D. Campo 15%
Informe 15%
14 26 al 31 de jul Entrega de Notas Definitivas. Recuperativos según reglamento de
evaluación si aplica.
lunes, 3 de mayo de 2010
CULTURA Y SOCIALIZACIÓN. EL CONCEPTO DE SOCIALIZACIÓN. EL CONCEPTO DE ROL Y STATUS: SUS TIPOS. LOS AGENTES DE SOCIALIZACIÓN.
2.- El proceso de socialización
3.- Agentes de socialización
1.- DETERMINANTES BIOLÓGICOS Y SOCIALES DE LA PERSONALIDAD: LA CULTURA.
1.1. Naturaleza o cultura.
¿De qué depende el individuo, cómo se configura nuestra personalidad? ¿A partir de nuestra genética o del medio/entorno social? ¿Qué somos herencia o ambiente? ¿Naturaleza o Cultura?.
El problema está en saber hasta qué punto esas circunstancias llegan a configurar la personalidad individual. En esto no todos los autores coinciden, sino que algunos proponen incluso soluciones extremas, exclusivistas y opuestas a otra. Cabría hacer tres grupos:
- Los que opinan que todo el desarrollo personal depende de factores constitucionales, hereditarios y congénitos (de orden biológico y psicológico, como los cromosomas y el temperamento).
- Los que piensan que esos factores no cuentan en absoluto, de tal modo que sólo intervienen causas ambientales, que obran de un modo decisivo.
- Por último, hay quienes admiten la influencia conjunta de la herencia y del medio social.
A) Los autores del primer grupo son más bien escasos. Entre ellos es clásico F. Galton, para quién las facultades mentales y artísticas son heredadas, según le mostraba el estudio de los mellizos; con eso contribuyó a inaugurar el movimiento de la eugenesia. Igualmente K. Pearson (1909) piensa que los factores biológicos dominan la evolución del género humano; estos y sólo estos, pueden dar luz sobre el nacimiento y caída de las naciones, sobre el progreso racial y la degeneración nacional.
B) Más frecuente que la posición anterior es la que, colocándose en sus antípodas y extremando igualmente sus tesis, sostiene que todo el desarrollo de la personalidad, viene condicionado por las circunstancias sociales entre las cuales se efectúa. Según J. Mill, toda la diferencia existente, o que pueda llegar a existir, entre una clase de hombres y otra, se debe enteramente a la educación.
En esas mismas ideas abunda el sociologicismo. Sus fundadores Durkheim y Nartop afirmaron que, si bien la naturaleza nos hace individuos, sólo la sociedad nos hace personas, ya que exclusivamente de la sociedad recibe el individuo todo lo que constituye su mundo espiritual: lenguaje, sentimientos, cultura, religión, arte, etc. Llamando educación, de un modo global, a todo ese bagaje con el que la sociedad (de forma impositiva) equipa a sus nuevos miembros y así los socializa, nos sale la conocida frase -idéntica en ambos autores- de que el hombre es hombre sólo porque vive en sociedad y es educado en ella.
La Sociología insiste en que la personalidad así definida no es innata, sino adquirida o lograda con el tiempo está determinada por el poder condicionante de la herencia cultural y por los modelos sociales de comportamiento que los grupos crean, aprueban, defienden y transmiten a la siguiente generación. Así el sociólogo ve la personalidad como un reflejo de las situaciones sociales en medio de las cuales el individuo se ha formado y ante las cuales reacciona. El self, la esencia personal (el sí mismo, el Yo), es un espejo social.
C) Cuando dos soluciones extremas se oponen y excluyen entre sí cabe la sospecha fundada de que ambas contengan parte de verdad, con lo cual la solución auténtica sería la que trate de conciliar ambos extremos, adoptando una postura de término medio que intente explicar el fenómeno a partir de los dos principios antinómicos propuestos en aquella tesis. Tal ocurre cuando, constatados los determinantes biológicos de la personalidad por su lado y condicionantes sociales por otro, concluimos que ambos deben de actuar a la vez, aunque sea en proporciones diversas. El carácter complejo de los fenómenos vitales nos invita también a esta solución.
En suma, como dice A.K.C. Ottaway, hay siempre una interacción entre factores innatos y culturales, y cualquier determinismo total es improbable. La antigua oposición entre naturaleza y educación (nature y nurture) es un error, puesto que ambas son necesarias y están en inevitable interacción.
Cuadro 2.1. Enfoques sobre la relación entre cultura y naturaleza
GENETISTAS
AMBIENTALISTAS
SINTÉTICOS
La personalidad en los genes
La personalidad en el ambiente social
La personalidad parte herencia y ambiente.
F. Galton.
E. Durkheim.
Quintana Cabanas.
Determinismo biológico
Determinismo sociológico
Acción conjunta.
1.2. ¿Qué es la cultura?
Es evidente que cultura, que en último término es una palabra latina comenzó teniendo un sentido atributivo, funcional: cultivo de algo, agricultura, o cultura animi que para Cicerón es como sinónimo de filosofía. Es decir, en principio la cultura es un proceso, el paso de inculto a culto a través de un ejercicio más o menos metódico, la educación (pero al mismo tiempo, educar es sacar algo de dentro de un mismo, algo que ya estaba allí; desarrollar una capacidad). En todo caso, más adelante, cultura adquiere carácter sustantivo; desde el Renacimiento ya será sobre todo el resultado de un proceso más que el proceso mismo, los frutos más que el cultivo.
La clásica definición de cultura dada por Tylor tiempo ha es un tanto vaga, pero fácil de entender: cultura es, según él, "un complejo que comprende conocimiento, creencias, arte, moral, leyes, usos y otras capacidades y usanzas adquiridas por el hombre en cuanto es miembro de una sociedad".
La cultura puede ser entendida como un sistema relativamente integrado de ideas, valores, actitudes, aserciones éticas y modos de vida, dispuestos en esquemas o patrones que poseen una cierta estabilidad dentro de una sociedad dada, de modo que influyen en su conducta y estructura. Todo aquello que el hombre y hace y que no procede únicamente de su herencia biológica queda, pues, cubierto por el campo de la cultura.
Básicamente la cultura consiste en contenidos de conocimiento y pautas de conducta que han sido socialmente aprendidos. La cultura, pues, requiere un proceso de aprendizaje, el cual es social, lo que no sólo quiere decir que nace de la interacción social, sino que la cultura consiste en patrones comunes a una colectividad. Estos patrones o pautas, no obstante, son abstractos la cultura se manifiesta en conductas concretas y en sus resultados, los cuales no son, en sí mismos cultura.
1.3. Elementos de la cultura.
La cultura tiene los siguientes elementos: los aspectos cognitivos, las creencias, los valores, las normas, los signos y los modos no normativos de conducta.
a) Toda cultura posee unos elementos cognitivos, es decir, un grado elevado de conocimientos objetivos sobre la naturaleza y la sociedad. De otro modo la colectividad no podría sobrevivir: desde los pueblos más primitivos a los más avanzados en complejidad cultural todos saben enfrentarse con la brega cotidiana, sean las que sean las creencias mágicas, religiosas, ideológicas y no objetivas.
b) Junto a estos sólidos elementos cognitivos están las creencias, de las cuales no afirmamos su verdad ni falsedad, pues son empíricamente incomprobables; las creencias son una fe sobre el cosmos y la vida, y se manifiestan también en acciones y resultados, sobre todo, la religión. Conviene señalar que existe un grado muy elevado de superimposición entre lo cognitivo y lo credencial, y que la distinción es puramente analítica. Así creer es también un modo de conocer la realidad, por muy falsas que sean las creencias de unos hombres según la opinión de otros hombres. En todo caso, el conocimiento perfecto no existe: poseemos sólo aproximaciones, más o menos profundas, a la verdad.
c) Por su parte los valores con que nos acercamos a la realidad y las normas de conducta que los enmarcan determinan nuestras actitudes. Puede decirse que los valores son juicios de deseabilidad o aceptabilidad, o de rechazo, que se atribuyen a toda clase de objetos y hechos. Los valores conllevan actitudes que superponemos a fenómenos dados, y que deben ser distinguidos cuidadosamente de los fenómenos mismos. Pronto se comprende que los valores no pueden manifestarse sin normas de conducta que los enmarquen y que tienen que ser aceptados por un número mínimo de miembros de la colectividad, y en muchos casos por todos. La desviación del valor y de la norma establecida suele implicar una reacción punitiva por parte de la colectividad en cuestión, aunque muchas sociedades complejas hayan institucionalizado un buen número de divergencias en un sistema de tolerancias aceptables.
d) Los signos culturales incluyen señales y símbolos. Los primeros indican un hecho, simplemente, como es el caso de las señales de tránsito. Los símbolos son más complejos y son parte central del sistema de comunicación que es la cultura. La red simbólica más importante es el lenguaje; sin él la estructura social se desvanecería. La sociedad humana es inconcebible sin lenguaje. Para estudiarlo desde el ángulo de mira de la sociología se ha desarrollado la disciplina de la sociolingüística, que introduce criterios demográficos, migratorios, ideológicos y políticos en la investigación de los datos referentes al lenguaje humano.
e) Finalmente, tenemos las formas de conducta no normativas, como son el estilo peculiar de las gentes de una comunidad nacional (Idiosincrasia).
2.- EL PROCESO DE SOCIALIZACIÓN. (Enculturación, culturalización o crianza).
2.1. Definición. ¿Qué es la socialización?
La socialización es el proceso mediante el cual el individuo es absorbido por la cultura de su sociedad. En su transcurso el individuo, ha escrito Child, "nacido con una gama de comportamiento potencial muy amplia, es conducido a desarrollar un comportamiento con límites más restringidos, consistentes en lo que es habitual y aceptable con arreglo a normas de su grupo".
a) Fundamentalmente, la socialización es un aprendizaje; en su virtud el individuo aprende a adaptarse a sus grupos, y a sus normas, imágenes y valores. Trátase de un proceso de aprendizaje de conducta. Como proceso es permanente, pues dura toda la vida del individuo y es perenne en la sociedad. Para el individuo la socialización es particularmente intensa durante sus primeros años.
b) El tema de la interiorización y transmisión de la cultura es vasto y debe ser enfocado interdisciplinarmente, con ayuda de la psicología social, la sociología, la antropología, la ciencia política. Cuando nos adentramos en él nos encontramos con uno de los mejores ejemplos de la unidad e interdependencia íntima de las ciencias sociales. Aprendizaje e interiorización dan como resultado la adaptación del individuo al grupo y, por consecuencia, la conformidad y la cohesión e integración social.
2.2. Tipos: socialización primaria y secundaria. ¿Cómo se desarrolla?
La principal distinción es entre socialización primaria y secundaria. Para Berger y Luckmann el individuo no nace miembro de una sociedad, sino que nace con una predisposición hacia la sociedad, y luego llega a ser miembro de una sociedad. En este contexto se sitúa la mencionada distinción. La socialización primaria es la primera por la que el individuo atraviesa en la niñez por medio de la cual se convierte en miembro de la sociedad. La socialización secundaria se refiere a cualquier proceso posterior que induce al individuo ya socializado a nuevos sectores del mundo objetivo de la sociedad.
a) La socialización primaria es decisiva y no sólo por la plasticidad, sensibilidad y dependencia en que se encuentra el niño. El niño no internaliza como el mundo posible, sino que lo internaliza como el mundo, el único que existe y se puede concebir. Por ello el mundo internalizado en la socialización primaria se implanta en la conciencia con mucha más firmeza que los mundos internalizados durante la socialización secundaria. Esto significa que la socialización primaria comporta algo más que un aprendizaje puramente cognoscitivo. Requiere la adhesión emocional a los otros significantes. Es así como el niño acepta los roles y actitudes de los otros significantes, los internaliza y se apropia de ellos, siendo entonces capaz de identificarse a sí mismo. La socialización primaria finaliza cuando el concepto del otro generalizado, y todo lo que comporta se ha establecido en la conciencia del individuo. Ya es miembro efectivo de la sociedad y está en posesión subjetiva de un yo y un mundo. Aquí cuenta la carga emocional.
b) La socialización secundaria consiste en el conjunto de procesos mediante los cuales el individuo internaliza submundos específicos. Posiblemente en sociedades primitivas, que cuentan con gran homogeneidad cultural y estabilidad, la socialización secundaria alcance poca relevancia. Pero éste no es el caso de sociedades complejas, con gran división del trabajo y distribución social de conocimiento. Se suele producir la socialización en contextos institucionales. Estos submundos son generalmente realidades parciales, que contrastan con el mundo base adquirido en la socialización primaria. Presupone un proceso previo de socialización primaria, pues debe tratar con un yo formado con anterioridad y con un mundo ya internalizado. Por otro lado mientras que la socialización primaria no puede efectuarse sin una identificación con carga emocional, la mayor parte de la socialización secundaria puede prescindir de esta clase de identificación.
Cuadro 2.2. Distinción entre Socialización Primaria y Socialización Secundaria
SOCIALIZACIÓN PRIMARIA
SOCIALIZACIÓN SECUNDARIA
ETAPA CRONOLÓGICA
Infancia
Madurez
INTERNALIZACIÓN
Fuerte
Débil
ADHESIÓN EMOCIONAL
Imprescindible
Prescindible
TOMA CONCIENCIA
Mundo social/total
Submundo social/parcial
TIPO DE SOCIEDAD
Primitiva y simple
Moderna y compleja
Otra noción importante es la resocialización. Tiene más semejanza con la socialización primaria, aunque se realice durante la fase adulta del individuo. Pretende la sustitución de la socialización anteriormente recibida por el individuo. Si en la socialización secundaria el presente se interpreta de modo que se halle en relación continua con el pasado, con tendencia a minimizar las transformaciones que se hayan efectuado realmente, no ocurre igual en la resocialización. En ésta el pasado se interpreta con la realidad presente, con tendencia a proyectar al pasado diversos elementos que, en ese entonces, no estaban subjetivamente disponibles.
La resocialización comporta, por consiguiente, un cambio básico y rápido del pasado. El ejemplo más conocido y estudiado se refiere a la delincuencia, especialmente juvenil. Pero no siempre la resocialización no aprobada por al sociedad. Casos como la emigración a otras áreas culturales o el divorcio también lo requieren. En todo caso la resocialización es difícil de efectuarse, pues, en cierta medida, exige reproducir las condiciones de la socialización primaria pero en la época adulta. Por ello alguna de las siguientes condiciones indicadas deben producirse:
- Control total sobre el individuo.
- Supresión de status pasados.
- Negación del valor moral del viejo yo.
- Participación del individuo en su propia resocialización.
- Sanciones extremas.
- Intensificación de las presiones y apoyo del grupo de iguales.
Otro concepto importante, acuñado por Merton, alude al grupo según el cual el individuo se socializa. Se trata de la socialización anticipatoria. Es una forma de socialización que tiene lugar cuando los individuos adoptan como grupo de referencia un grupo al que no pertenecen, pero aspiran a pertenecer en el futuro, socializándose de acuerdo con lo que perciben de sus normas antes de haberse incorporado a él. Por tanto, amplia el concepto conocido ya de antiguo de la determinación grupal de la conducta. Pues bien, la socialización anticipatoria, al adoptar el individuo los valores de un grupo al cual no pertenece, puede servir a la doble función de ayudar a su elevación dentro de ese grupo y de facilitar su adaptación una vez que ha llegado a formar parte de él. El propio Merton subraya la importancia de la socialización anticipatoria en los procesos de movilización social y la diversidad de consecuencias que puede suscitar. Consecuencias que pueden ser diferentes para los individuos que la manifiestan, los grupos a que pertenecen y la estructura social más amplia. Así para el individuo la socialización anticipatoria es funcional sólo dentro de una estructura social relativamente abierta.
En definitiva, lo que aprende en el proceso de socialización es la cultura, es decir, un complejo conjunto de pautas de comportamiento recurrentes que le permiten saber a qué atenerse en cada situación, qué debe esperar de los demás, cómo debe reaccionar en cada caso concreto y qué pueden esperar los demás de él. Los nuevos miembros de la sociedad aprenden cómo deben actuar, o qué consecuencias pueden razonablemente derivarse si deciden desviarse de las pautas establecidas por el grupo. Este aprendizaje es esencial para la pervivencia de la sociedad.
Pero estas normas y pautas de comportamiento que el individuo aprende en el proceso de socialización no están aisladas y sin conexión entre sí, sino que forman complejos a los que llamaremos papeles sociales (roles) y que corresponden a las distintas posiciones (status) que los individuos pueden ocupar en sus relaciones sociales.
2.3. Concepto del rol y status. ¿Qué contenidos tiene?
a) La sociedad no es simplemente un conglomerado accidental y desordenado de seres humanos. Es un sistema estructurado en el que cada individuo ocupa una posición (status) definida. Se entiende por status social el puesto que cada individuo ocupa en la estructura social, tal como lo evalúa la propia sociedad. Una misma persona ocupa diferentes status en función del contexto en que se relacione o del grupo desde el que se defina.
b) A cada status le corresponde un repertorio de pautas y normas de comportamiento que prescriben, a la persona que lo ocupa, cómo deberá actuar en cada situación y lo que los demás pueden razonablemente esperar que haga en virtud del lugar que ocupa. Llamamos papel (rol), al conjunto de todas estas pautas de comportamiento asociadas a cada status. La importancia de los papeles sociales radica, no sólo en el grado en que regulan la conducta, sino también en el hecho de que permiten a los hombres predecir los actos de los demás, y determinar, por tanto, sus propios actos de acuerdo con aquellos. En consecuencia, las relaciones sociales existen entre los papeles desempeñados por los miembros de una sociedad.
En todo caso, los conceptos de status y rol son dos herramientas fundamentales en el análisis del comportamiento social que, como vemos, están íntimamente relacionados entre sí. Se trata de dos caras de una misma moneda. A un status se le asocia siempre un conjunto de roles y, por su parte, un rol lo es siempre del status del que deriva. El status se ocupa, los roles se desempeñan. Esta es la razón por la que algunos sociólogos asocian los status a los aspectos estáticos del sistema social, y los roles a los aspectos dinámicos. Así, status se relaciona con la estructura de la sociedad, y roles con la función:
Cuadro 2.3. Oposición entre Status y Rol
S T A T U S
R O L
Posición social
Papeles sociales
Se ocupa
Se desempeñan
Estructura social
Función social.
Valorativo (valor):
- Prestigio.
- Dignidad.
- Categoría.
Normativo (deber de):
- Pensar.
- Decir.
- Actuar.
Estática social.
Dinámica social.
2.4. Tipos de status.
Entre esa multiplicidad de status, algunos tienen un fundamento biológico. En todas las culturas, la edad o el sexo determinan alguna de las posiciones que pueden ocuparse. Pero la mayoría de ellos surgen del proceso mismo de la vida colectiva, de sus actividades económicas, políticas o religiosas. Una forma común de clasificar los status consiste en distinguir entre adscritos y adquiridos.
- Un status adscrito deriva de factores sobre los que el individuo carece de control y, por tanto, es independiente de su voluntad. El status de hijo o el de heredero a la corona pertenecen a esta clase.
- Por el contrario, el status adquirido depende de acciones positivas y, en ocasiones, del esfuerzo del propio interesado por alcanzarlo: los status de esposo, profesor, líder sindical...
En la medida en que la estructura del grupo está formada por el conjunto de status que lo integran, cada persona ocupa, al menos, tantos status como grupos a los que pertenece. Sin embargo, existe siempre uno que es el status clave porque identifica al individuo socialmente y le sitúa en la estructura social. La determinación de cuál sea ese status principal depende de la forma en que cada sociedad valore las distintas actividades institucionales. En una sociedad en la que la mayoría de las actividades se organizan en torno a las relaciones de parentesco, el status familiar ocupa el lugar preeminente. En la nuestra, en la que se concede una fuerte valoración al éxito económico, el status dominante suele ser el profesional. La profesión es; generalmente, el criterio fundamental en la valoración de la personalidad social.
3.- LOS AGENTES DE SOCIALIZACIÓN.
3.1. Enumeración de los agentes de socialización más importantes.
En sentido amplio, todos somos agentes de socialización. Medios informales difusos, en sociedades estables y sencillas, pueden resultar lo suficientemente eficaces para lograr la socialización de los nuevos miembros de la sociedad. Pero en sociedades complejas, heterogéneas y con grandes ritmos de cambio social, no basta con la socialización informal. La herencia cultural del grupo cuenta con demasiada complejidad para lograrse con procedimientos tan espontáneos. Agencias de socialización se emplea para referirse a las instancias o vías, mediante las cuales se efectúa la transmisión de conocimientos, valores, etc. Agencias que son múltiples y pueden, en teoría, reforzar sus efectos, pero también provocar discontinuidades y problemas generacionales en el proceso de socialización. En concreto la familia, el grupo de iguales, escuelas, las asociaciones de todo tipo y los medios de comunicación de masas constituyen las principales agencias de socialización.
* La familia socializa al niño, pero no crea los valores que le inculca.
Estos valores pueden tener ‑y de hecho tienen‑ las más diversas procedencias: la religión, la clase social, la nación, etc. Por esto, la familia transmite valores creados fuera de ella, es un simple agente transmisor. Davis señala la importancia de la familia en la socialización en los siguientes puntos:
i. La familia es la primera agencia que recibe al niño y en ella se inicia el proceso.
ii. La influencia de la familia es profunda también porque es el elemento persistente.
iii. Es el grupo más íntimo que actúa en la socialización.
iv. Está vinculada a la satisfacción de necesidades materiales y espirituales.
v. Proporciona relaciones autoritarias e igualitarias.
vi. La comunidad general identifica a los miembros de la familia entre sí.
* Como la familia, otros grupos primarios intervienen en el proceso de socialización. Se trata de los llamados grupos de iguales, en los cuales las relaciones son también íntimas y cara a cara.
Concretamente en la infancia, el grupo de iguales ayuda a introducir en sus miembros la noción de autoridad informal y, por tanto, a desarrollar una idea diferente de la estructura de mando con relación a la familia. Al analizar el papel de desempeña como filtro entre los medios de comunicación de masas y los receptores de la misma. Riesman ‑en "La muchedumbre solitaria"‑ quien ha destacado su importancia. Sostiene que el grupo de iguales está convirtiéndose en la más importante agencia de socialización. Distingue, en efecto, tres tipos de carácter social que denomina dirigidos por la tradición, el de dirección interna y el de dirigidos por otros:
* Dentro de los grupos secundarias destaca en especial el sistema educativo ya que constituye el ámbito formal para la transmisión cultural entre generaciones.
La socialización se efectúa en el contexto y con medios y órganos especiales. En ella actúan, además, grupos e iguales que, como se ha visto, interviene también en el proceso de socialización. Su influjo se filtra a través de múltiples vías, según Carlos Alba:
i. El currículum. A través de las asignaturas impuestas, el contenido de los programas y libros de textos.
ii. Junto al anterior, el conjunto de actos que constituyen los ritos de la escuela suponen igualmente un importante instrumento de socialización. La escuela será el primer ámbito donde los individuos experimentará la competitividad, la necesidad de productividad y rendimiento, ritmos horarios y secuencias fijos e impuestos.
iii. El propio profesor. Constituye un modelo de autoridad, apoyado en conocimientos específicos, y son quienes en definitiva transmiten unos valores determinados. No en vano todos los sistemas políticos procuran controlar cuidadosamente la selección de individuos que van a desempeñar este papel.
* Los medios de comunicación de masas.
Proporcionan informaciones juicios sobre acontecimientos, ofrecen modelos de comportamiento y, además, sus contenidos repercuten en un volumen de población superior al de cualquier otra agencia. Hasta tal punto son importantes en el proceso de socialización que pueden distinguirse dos épocas, antes y después de la aparición y difusión de estos medios, principalmente la televisión.
3.2. Clasificación de los agentes de socialización.
Mejor aún que una simple enumeración en un pseudo‑orden de importancia, será el intento de clasificar esos agentes de acuerdo con tres criterios:
a) Cabe clasificar los agentes de socialización según tengan por objetivo explícito y reconocido formar, educar, inculcar unos principios, dispensar unos conocimientos; o, por el contrario, según que los agentes socializadores ejerzan esa función de un modo solamente instrumental, con miras a otras actividades o a otros fines como objetivo explícitos.
b) Se pueden clasificar distinguiendo por formar grupos de edad heterogéneos, o por constituir grupos de edad homogéneos. Habría que completar, sin embargo, la distinción propuesta por Eisenstadt, añadiendo que ciertos grupos o instituciones pueden también caracterizarse simultáneamente por la homogeneidad y la heterogeneidad de las edades.
c) Otro criterio de clasificación sería distinguir entre grupos primarios y secundarios combinados con el criterio anterior que consistía en distinguir aquellos agentes que tienen como finalidad específica justamente la socialización, y aquellos otros que contribuyen también, aunque sin tenerlo como finalidad propia, a socializar a sus miembros. (En 1909 Charles H. Cooley elaboró el concepto de grupo primario. Según Cooley el grupo primario se caracteriza por el reducido número de miembros que lo integran, lo que permite unas relaciones cara a cara face to face entre todos sus miembros. En el grupo primario todos los miembros se conocen personalmente y mantiene relaciones directa, este hecho, unido a un clima afectivo generalmente intenso, hacen posible la expresión libre, relativamente, y espontánea de las personalidades de sus miembros. Los grupos secundarios se oponen a estas características).
Cuadro 2.4. Comparación entre grupos primarios y secundarios.
GRUPO PRIMARIO
GRUPO SECUNDARIO
Nº pequeño de miembros
Nº grande de miembros
Relaciones:
- Personales (face to face)
- Directas
- Entre todos
Relaciones:
- Impersonales.
- Indirectas
- Entre algunos
Clima afectivo
Clima aséptico
Libre expresión de personalidad
No hay expresión de personalidad
Ejemplos:
(Familia. Pandillas...)
Ejemplos:
(Grandes empresas, Sindicatos...)
BIBLIOGRAFÍA
ROCHER, G. (1975), Introducción a la sociología general, Herder, Barcelona.
MORALES NAVARRO, J. y ABAD MÁRQUEZ, L.V. (1996), Introducción a la sociología, Tecnos, Madrid.
LA SOCIOLOGÍA COMO CIENCIA EMPÍRICA
Disponible en: http://www.scribd.com/doc/7286310/La-Sociologia-Como-Ciencia-Empirica
INTRODUCCIÓN: DEFINICIONES DE SOCIOLOGÍA
Definición por J. Jiménez Blanco
“Es una ciencia empírica de la organización de los grupos humanos”. Por lo tanto destaca ciertos aspectos fundamentales:
Es una ciencia empírica
Se ocupa de las organizaciones.
Se ocupa delos grupos humanos
Definición por Teodor Caplow
“Es un estudio científico de las relaciones humanas y sus consecuencias”.
Coincidencias entre las definiciones: la sociología se trata de una ciencia.
Diferencias entre las definiciones:
- Jiménez Blanco estudia el grupo humano y su estructura
- T. Caplow estudia las relaciones humanas y sus consecuencias.
1.- PROCESOS DEL CONOCIMIENTO. SABER VULGAR Y CIENTÍFICO.
1.1. Saber vulgar y saber científico.
Todos los hombres poseen mayores y menores conocimientos según el grado y modo de participación en la totalidad de la cultura. En todos los hombres existen saberes y conocimientos, pero por las formas o tipos de adquisión pueden discernirse dos modos principales (aunque existen otros como el filosófico, el mítico, el religioso...):
- el saber cotidiano o vulgar.
- el saber científico.
Se sabe, pues, de manera natural por el solo hecho de vivir, y se sabe científicamente cuando existe disposición de conocer con arreglo a ciertos procedimientos.
a) Saber cotidiano.
Es el saber o conocimiento que se adquiere en la experiencia cotidiana. Se trata de conocimientos inconexos entre sí, a veces superficiales, constituidos por una yuxtaposición de casos y hechos. Es el modo común, corriente y espontáneo de conocer que se adquiere en el trato directo con los hombres con las cosas, es ese saber que llena nuestra vida diaria y que se posee sin haberlo buscado o estudiado, sin aplicar un método y sin haber reflexionado sobre algo.
Su contenido es la suma de todos nuestros conocimientos sobre la realidad que utilizamos de un modo efectivo en la vida cotidiana y del modo más heterogéneo (como guía para las acciones, como tema de conversaciones etc.) Existe un determinado mínimo de saber cotidiano. ¿Cuál es ese mínimo?, pues, la suma de los conocimientos que todo sujeto debe interiorizar para poder existir y moverse en su ambiente. Según las épocas y los estratos sociales, cambia el contenido y extensión del saber cotidiano.
Este saber cotidiano se caracteriza por ser superficial, no sistemático y acrítico.
- Cuando decimos que es superficial no es en el sentido de frívolo, insustancial o ligero, sino de que se conforma con lo aparente, con lo que comprueba en el simple pasar junto a las cosas. Se expresa en frases como porque me lo dijeron, porque lo vi, porque lo leí, porque todo el mundo lo dice; para este tipo de conocimiento el criterio de evidencia inmediata es suficiente.
- Otra característica que se le atribuye al saber de la vida cotidiana, es la de ser no sistemático, tanto en la forma de adquirirlos y vincularlos como en el modo de establecer cánones de validación. Se limita a percibir lo inmediato a través de experiencias, vivencias, estados de ánimo y emociones de la vida diaria, permaneciendo al nivel de certeza sensorial. El mismo sujeto organiza las experiencias y conocimientos de un modo no sistemático.
- Decíamos que también es acrítico, puesto que apoyado sólo en la evidencia inmediata, sólo percibe la epidermis de la realidad. Los conocimientos del saber vulgar pueden ser verdaderos o no, lo cierto es que la pretensión de serlo no se plantea de una manera crítica o reflexiva. Como ya se dijo, es un conocimiento que está al nivel de certeza sensorial, o sea, un saber que puede decir acerca de lo que pasa, pero no porque pasa lo que pasa.
b) Saber científico.
Sin embargo, debemos tener en cuenta que en nuestra época el saber cotidiano está penetrado por el saber científico. Se trata de algo reciente que se ha verificado paralelamente a la difusión de los medios de comunicación de masas. El saber cotidiano acoge (o puede suceder que acoja), ciertas adquisiciones científicas, pero no el saber científico como tal.
En su práctica social el hombre se enfrenta a una serie de problemas que no puede resolver con los conocimientos corrientes, ni por sentido común. Por otro lado, para el hombre que naturalmente desea saber, como decía Aristóteles, no le basta la captación de lo externo, ni el sentido común, puesto, que existen fenómenos que no se captan en el solo nivel perceptivo. Es preciso superar la inmediatez de la certeza sensorial del conocimiento ordinario. Este salto -que no supone una discontinuidad radical en lo que hace a la naturaleza, pero sí en cuanto al método- conduce al conocimiento científico.
Cuadro 1.1. Oposiciones entre el saber vulgar y científico
SABER VULGAR O COTIDIANO
SABER CIENTÍFICO
Superficial
Profundo o sólido
Asistemático o desordenado
Sistemático o metódico
Acrítico
Critico o auto-correctivo
Doxa o opinión
Episteme o comprobado
1.2. Evolución de la noción de ciencia.
La palabra ciencia se deriva etimológicamente en las lenguas modernas del vocablo latino scientia. En el latín ciencia tiene un sentido muy amplio y significa: conocimiento, práctica, doctrina, erudición. Esta concepción latina de ciencia concuerda con el significado del origen de su raíz, el verbo latino scio que se deriva a su vez del griego isemi. Este verbo griego equivale también a saber, en toda la extensión de la palabra: conocer, tener noticia de, estar informado.
Por tanto, ciencia en su acepción original y más general, equivale a toda clase de saber. Sin embargo, históricamente, ciencia vino a significar, de modo más preciso, un conjunto de conocimiento sistematizado sobre una materia. Esta noción coincide con lo que hoy entendemos por disciplina. Y así, en este sentido, se puede decir que en la Edad Media las ciencias o disciplinas por antonomasia fueron la Filosofía y la Teología.
Con el desarrollo del saber experimental y la insistencia en el método inductivo, el concepto de ciencia ha quedado reservado modernamente para el conocimiento teórico, inductivo y sistemático sobre la realidad, derivado de la observación y experimentación metódicas.
1.3. Concepto y características actuales de la ciencia.
La ciencia se puede definir, en sentido estricto, como un conjunto de conocimientos sobre la realidad observable, obtenidos mediante el método científico.
Según esta definición son tres los elementos esenciales de la ciencia, que configuran su naturaleza: Un contenido, un campo de actuación y un procedimiento o forma de actuar.
a) La ciencia en cuanto a su contenido está constituida exclusivamente por un conjunto de conocimientos sobre la realidad, en forma de términos y de enunciados. Las ideas de este conjunto se hallan interrelacionadas entre sí y forman lo que se llama la teoría.
Es necesario darse cuenta de que la ciencia aunque se refiere a la realidad empírica, no está formada por hechos sino en todo caso por ideas. El hombre solo puede captar la realidad conceptualmente.
b) El campo de actuación propio y único de la ciencia es la realidad observable, la realidad de este mundo en que vivimos. Lo no empírico, digamos lo trascendente, cae fuera del campo de la ciencia. Esta no se puede pronunciar como tal, ni sobre su verdad, ni sobre su falsedad.
c) Por último, la ciencia utiliza como procedimiento o forma de actuación en la formación el conjunto de conocimientos que la integran, el método científico, que es el que la tipifica, como se ve a continuación.
1.4. El método científico.
Si analizamos etimológicamente la palabra método vemos que deriva de las raíces griegas metá y odos. Metá (hacia, a lo largo) es una proposición que da idea de movimiento y odos que significa camino. Por esto, en su estructura verbal, la palabra método quiere decir camino hacia algo, persecución, o sea, esfuerzo para alcanzar un fin o realizar una búsqueda. Método como forma ordenada de llevar a cabo determinadas acciones.
Lo más característico y específico de la ciencia, aquello que la constituye como tal y la distingue de los demás tipos de conocimiento es el método científico. La ciencia no se distingue de otros tipos de conocimiento por los objetos sobre los que versa.
La ciencia, pues, no es otra cosa que un conjunto de conocimientos obtenidos por la aplicación del método científico, y, por tanto, es el resultado de este método.
Por ello, un científico es, ante todo, no el que tiene muchos conocimientos sobre una materia determinada, lo que es importante y valioso, sino quien sabe utilizar correcta y eficazmente el método científico en su campo.
De aquí la importancia del método científico. A él hay que atribuir en gran parte, sin duda el extraordinario desarrollo de la ciencia. Se puede decir que la ha posibilitado.
No está demostrado que los hombres a partir del siglo XVII sean más inteligentes que los anteriores. Sin embargo, han hecho avanzar grandemente la ciencia porque abandonaron el método escolástico e iniciaron el método científico.
El método científico consiste en formular cuestiones o problemas sobre la realidad del mundo y los hombres, con base en la observación de la realidad y la teoría ya existentes, en anticipar soluciones a los problemas, mediante la observación de los hechos que ofrezca, la clasificación de ellos y su análisis.
- Método inductivo: Experiencia como punto de partida de generación de conocimientos.
- Método deductivo: Se establecen leyes generales (razonamiento) y se deducen consecuencias lógicas que se pueden contrastar con datos.
- Método hipotético deductivo. Conjunción de ambos. Conjunto de pasos secuenciados que se siguen al realizar una investigación:
a. Formulación del problema.
b. Formulación de la hipótesis.
c. Recogida de datos.
d. Análisis de datos y resultados.
e. Conclusiones y generalización de resultados.
1.5. Tipos de ciencia.
Delimitado el concepto de ciencia como un modo de adquisición de conocimiento de forma crítica y sujeto a un método, cabe ahora distinguir cuáles son los distintos tipos de ciencias.
En primer lugar podemos realizar una distinción entre ciencias normativas y ciencias positivas; mientras que la primera busca deducir a partir de un conjunto de principios y axiomas concluir cómo debería de ser la realidad, la segunda pretende inducir a partir de los datos empíricos y de los hechos como es la realidad. Resumiendo, las ciencias normativas como el derecho, ética y moral... son ciencias del deber ser frente a las ciencias positivas como la física, matemáticas, sociología..., que son ciencias del ser.
Cuadro 1.2. Oposiciones entre Ciencias Normativas y Positivas.
CIENCIAS NORMATIVAS
CIENCIAS EMPÍRICAS
OBJETO o BASE
El deber ser
El ser
METODOLOGÍA PRINCIPAL
Deductiva
Inductivo e
Hipotético-deductivo
PRODUCTO
Normas y principios
Leyes
EJEMPLOS
Ética, Derecho...
CC.NN. y CC.SS.
El objetivo de este tema era ubicar la sociología en el contexto de los saberes, y como adelanta el título la sociología nos la vamos a encontrar junto a las ciencias empíricas o positivas. Toca ahora, por tanto desarrollar brevemente que tipos de ciencias positivas hay y cuáles son sus diferencias.
2.- LAS CIENCIAS EMPÍRICAS: CC. DE LA NATURALEZA Y CC. SOCIALES
Las ciencias positivas nos habla de lo que son las cosas de los hechos, de lo empírico y la experiencia, de lo que nos rodea y de lo que somos; en definitiva, podemos distinguir dos tipos de realidades, por una parte, la naturaleza o todo lo que nos circunda, y por otra, el ser humano, es decir, todo aquello relacionado con lo que somos nosotros mismos. Esta distinción es la que pertenece a la diferencia entre ciencias naturales y ciencias sociales.
Cada una de estas dos ciencias positivas tuvieron un desarrollo distinto y en diferentes momentos históricos. Fue en el barroco cuando las ciencias naturales tuvieron su asentamiento como ciencia moderna con un avance importante en el mundo de la física y de la cosmología; mientras las ciencias sociales se configuran como tales, en el siglo XIX con la aparición de la sociología, psicología... Esta juventud de las ciencias positivas, y en particular de las ciencias sociales, no es obstáculo para que ya tengan una solera y un asentamiento en la historia contemporánea del saber.
El objeto de estudio de las dos clases de ciencias positivas: naturaleza y hombre; les diferencia en sus fundamentos o bases epistemológicas. La naturaleza, por su parte, está sujeta al determinismo, a la relación necesaria entre causa-efecto que el físico, químico intenta desentrañar. Por otra parte la dificultad de las ciencias sociales y del ser humano es que el propio sujeto de conocimiento es, a su vez, el que se coloca en situación de ser estudiado; un objeto que, además, se define por su libertad e indeterminismo en sus acciones, pensamientos y en su ser mismo.
No es extraño que el producto de estas dos ciencias positivas sea distinto, en una se formularán leyes absolutas, en la otra sólo podrá hablarse de probabilidades o leyes probables.
Cuadro 1.3. Oposiciones entre las Ciencias Naturales y Sociales.
CIENCIAS NATURALES
CC. SOCIALES Y HUMANAS
OBJETO o BASE
La naturaleza
El hombre
PRINCIPIO EPISTEMOLÓGICO
Determinismo
Indeterminismo (libertad)
METODOLOGÍA
Cuantitativa
Cuantitativa y cualitativa
PRODUCTO
Leyes absolutas
Leyes probabilísticas
EJEMPLOS
Física, química...
Sociología, Sicología...
Cuadro 1.4. Visión de conjunto de los saberes y sus subtipos.
S
A
B
E
R
SABER
VULGAR
SABER
CIENTÍFICO
CIENCIAS
NORMATIVAS
CIENCIAS
EMPÍRICAS
CIENCIAS NATURALES
CIENCIAS SOCIALES
3.- NACIMIENTO Y OBJETO DE LA SOCIOLOGÍA: "EL HECHO SOCIAL"
3.1. Los orígenes de la Sociología.
La Sociología como disciplina autónoma desligada de la metafísica, la ética o la teología y comprometida con las exigencias del método científicos, nace a mediados del siglo XIX. Durante mucho tiempo, ha sido usual citar el nombre de Comte como fundador de la Sociología. Ciertamente, fue él el primero en utilizar el término sociología para sustituir su anterior expresión de física social.
Generalmente, las ciencias como los grandes descubrimientos, han surgido en la historia como resultado de un proceso complejo de interacción multicausal. El modo de pensar sociológico nació como fruto de un proceso y en el interior de un determinado contexto. Como cualquier acontecimiento histórico, es el resultado de múltiples causas. Y, en tanto que práctica intelectual, son muy diversos los razonamientos, argumentos, teorías, etc., que propiciaron su génesis.
Este contexto histórico en el que situamos el nacimiento de la Sociología viene marcado por un conjunto de factores que, en favor de la claridad expositiva, podemos agrupar en dos tipos: factores de orden intelectual-teórico, y factores de orden social y económico.
A) Factores de orden intelectual-teórico:
- El positivismo y las exigencias del método científico.
Si la sociología se distingue en algo de la anterior reflexión filosófica acerca de la sociedad, es en su intención de sujetarse a la disciplina del método científico y de la observación empírica de los hechos en el análisis de la sociedad. El método científico diseñado en el Renacimiento por hombres como Galileo y aplicado en primer término a la Física, había conducido a esta disciplina a un grado de desarrollo espectacular.
El propio Comte reconoce su admiración por este hecho y confiesa su intención de aplicar al estudio de la sociedad el mismo método que los físicos utilizan en el estudio de la naturaleza.
La aceptación consciente y sistemática de las exigencias del método científico en el estudio de la sociedad hasta el punto de hacer del ello su signo diferenciador respecto a la filosofía social, es inútil buscarlo con anterioridad al positivismo.
- El descubrimiento de la existencia de leyes sociales. A. Comte.
Pero la insistencia positivista en el método científico hubiera resultado estéril, de no incidir sobre una idea que se generaliza en el siglo XVIII: la sociedad, como la naturaleza, está sometida a un conjunto de leyes que regulan el devenir social y la historia. En el siglo XVIII nace la idea de que los fenómenos sociales poseen un carácter de regularidad y que por lo tanto están sometidos a leyes naturales más o menos análogas a las que gobiernan el universo físico: la elaboración de este concepto de leyes sociales, constituye un progreso decisivo, pues la ciencia tiene precisamente por fin, la investigación de dichas leyes por métodos experimentales. El mérito de A. Comte, que toma esta idea del siglo XVIII, reside en el hecho de haber sistematizado dicho principio y haber efectuado el primer análisis completo. La misión de la Sociología consiste, principalmente en descubrir estas leyes.
El propio Comte creyó haber descubierto una, en la formulación de la ley de los tres estados. El saber universal ha atravesado, a lo largo de su historia, tres etapas (estados): Estado teológico, metafísico, positivo.
Cuadro 1.5. La Ley de los Tres Estados (A. Comte)
TEOLÓGICO
METAFÍSICO
POSITIVO
Explicación sobrenatural
Ficticia
Sociedad militar
Infancia
Explicación por entes
Abstracta
Sociedad legalista
Juventud
Explicación real
Científica
Sociedad industrial
Madurez
- Autonomía de la sociedad civil.
Pero si preguntamos por qué ahora y no antes cuando nace la Sociología como aquí la entendemos. Habrá que referirse al hecho de que es en este siglo cuando aparece la idea de que la sociedad posee una realidad autónoma respecto a las instancias a las que tradicionalmente venía refiriéndose. La idea de sociedad civil como algo distinto y autónomo respecto a la Ciudad de Dios (religión) o al Estado (político), nace ahora como aportación e los filósofos de la Historia. Cuando la fuerza de las instancias a que venía siendo referida se resquebrajan (como consecuencia de las revoluciones), la sociedad se convierte en sí misma en objeto de estudio e investigación. En este punto, los filósofos de la historia como Hegel, juegan un papel importante.
- Las ideas evolucionistas.
Por último, las ideas evolucionistas jugaron también un papel fundamental en el nacimiento de la Sociología. H. Spencer otro de los padres fundadores junto A. Comte asimila el evolucionismo de Darwin. En concreto, según Spencer las sociedades han evolucionado, desde las sociedades simples a las compuestas:
1.6. Evolución social según H. Spencer
Familias------->------Clanes-------->-------Tribus-------->-------Estado
CARACTERÍSTICAS:
Simple----------->----------(ESTRUCTURA)------------>-----------Complejo
Generalidad---->-----------(FUNCIONES)-------------->-----------Especialidad
B) Factores sociales y políticos.
- La revolución industrial. (Económicos)
Hablar de los orígenes de la Sociología sin referirse a las transformaciones sociales, políticas y económicas que conmovieron a Europa como consecuencia de la revolución industrial primero, y de la revolución francesa después, resulta imposible. Los hechos son sobradamente conocidos. La industrialización significa un cambio radical en el modo de producción económica. La agricultura deja de ser la base fundamental en la economía de las naciones. La producción artesanal y la organización gremial del trabajo dan paso a un nuevo modo de producción basado en la industria, en la libertad de mercado y en la organización racional del trabajo. La riqueza de las naciones depende de la base productiva y no de la cantidad de dinero acumulado, como quería el mercantilismo.
Libre de toda suerte de ataduras que lastraron durante siglos la actividad económica (privilegios estamentales, organización gremial, etc.), la burguesía asumió el protagonismo en la dirección de la economía y se lanzó a la búsqueda del máximo beneficio mediante la organización libre del trabajo y la adopción creciente de nuevas tecnologías derivadas del desarrollo científico.
- El auge de los ideales democráticos. (Políticos)
Estos hechos no pudieron por menos de cuestionar radicalmente el viejo orden jurídico y político del ancien régime. La revolución francesa significó el final del orden estamental basado en los privilegios de la aristocracia y el clero. La burguesía se consolidó como clase social dominante y, aunque fuera de manera incipiente y, en gran medida, meramente formal, los ideales democráticos irrumpieron definitivamente en la teoría política.
- El capitalismo y la cuestión social. (Sociales). Pero la progresiva concentración de mano de obra en torno a los grandes centros fabriles, trajo consigo, necesariamente, la aparición de una nueva clase social: el proletariado. La organización libre del trabajo, significó en la práctica, la ausencia de toda regulación en las relaciones laborales y empobrecimiento progresivo de las masas obreras como consecuencia de los salarios de miseria con los que el capital buscó incrementar la plusvalía. Pronto esta nueva clase social se organizó en sindicatos y partidos revolucionarios y Europa se vio envuelta en un clima de conflictividad social y política sin precedentes. La cuestión social fue uno de los factores decisivos en el complejo multicausal a que antes aludíamos, como responsable del nacimiento de la sociología.
3.2. El objeto de la Sociología.
En relación con otras disciplinas científicas, la Sociología se encuentra en una situación desconcertante: su primera tarea, y justamente la más difícil, consiste en decir cuál es su objeto de estudio. Existen profesionales de la Sociología, Facultades de Sociología, revistas y publicaciones dedicadas a la sociología y se celebran Congresos Internacionales de Sociología. Sin embargo, aún hoy, los sociólogos no han logrado ponerse de acuerdo acerca de qué debe entenderse por Sociología, cuál es su campo propio de estudio o cuáles son los límites precisos que la diferencian de otras ciencias sociales, como la Antropología, la Historia o la Psicología Social.
Razones de la dificultad en la determinación del objeto.
A) Coincidencia del sujeto y el objeto en la investigación sociológica.
Es cierto que no faltan razones para explicar este desacuerdo. En general cualquier ciencia en la que el hombre sea, al mismo tiempo, sujeto y objeto de investigación, tendrá un margen de indefinición y prejuicios distorsionan inevitablemente el análisis de un objeto -el hombre-, que ya en sí mismo se caracteriza por su infinita plasticidad e inestabilidad. Se trata por tanto, de una ciencia inmersa en su propio objeto el cual por sí mismo, es un objeto inacabado y cambiante.
B) El análisis social y el sentido común.
Por otra parte, el sociólogo pretende analizar científicamente hechos y acontecimientos acerca de los que, por su especial proximidad, todo el mundo cree saber algo. Con frecuencia, estas conclusiones de sentido común están tan fuertemente arraigadas, que resulta difícil, incluso para el sociólogo, sustraerse a ellas y, en ocasiones, distorsionan el análisis sociológico.
Si sus conclusiones están de acuerdo con el sentido común, la Sociología será simplemente, una ciencia de lo obvio que justifica mediante una enorme parafernalia científica (encuestas, estadísticas, muestreos, etc.) Lo que todo el mundo sabe. Si, por el contrario, sus conclusiones contradicen el sentido común, probablemente se le mirará con recelo por cuestionar lo evidente y defender posturas absurdas o peligrosas.
C) Imprecisión en los límites con las demás ciencias sociales.
La imprecisión en los límites con el resto de las ciencias sociales es otra de las fuentes de indefinición. La Sociología comparte objeto con las demás ciencias sociales. Todas ellas estudian la sociedad desde diferentes puntos de vista.
Sus primeros representantes la consideraron como la ciencia síntesis en la que debían converger todas las demás ciencias sociales particulares. Su carácter enciclopédico les autorizó a ofrecer grandes visiones generales de la Sociedad y de la Historia. En este empeño encontraron la razón de ser de la Sociología y justificaron el punto de vista de su objeto.
En la actualidad, los sociólogos (o al menos la mayoría) han renunciado a este intento de ofrecer grandes teorías omnicomprensivas de la Sociedad y la Historia en general. Aun reconociendo su carácter sugestivo y estimulante, estas grandes teorías no son susceptibles de verificación empírica y, por consiguiente, no pueden ser consideradas teorías científicas. Con ello, la Sociología ha perdido su dimensión de ciencia-síntesis, que cierra el edificio de las ciencias sociales; renunciando a la posición de privilegio en que la colocaron los primeros fundadores. Es lógico que este proceso trajera como consecuencia la pregunta por el objeto de la Sociología.
D) Inmadurez de la ciencia.
Por último, algunos autores atribuyen el problema simplemente a una presunta inmadurez de la ciencia. En su corta historia (apenas siglo y medio), la Sociología no habría conseguido elaborar aún un cuerpo teórico suficientemente contrastado y seguro. La imprecisión y el desacuerdo en la utilización de términos y conceptos, sería una consecuencia de esta situación.
3.3. El objeto de la sociología: Los hechos sociales según Durkheim.
En el siglo XIX, los padres de la Sociología, Saint-Simón, Comte, o Marx... no supieron dar una respuesta clara a la pregunta de cuál es el objeto de esta ciencia que estaba naciendo. Comte convirtió a la Sociología como al positivismo en una religión, con su catecismo y sus normas morales; también Marx derivó la Sociología en una mera ideología que defendía intereses particulares de clases y de opciones políticas y de proyectos de sociedad distinta.
Habrá que esperar a Durkheim (1864-1920) para que exista una verdadera respuesta a la pregunta del objeto de la sociología, y es por eso que sería a él al que habría que atribuir la auténtica paternidad de la sociología como ciencia positiva.
El objeto de la sociología, lo que la configura y define es el estudio de los hechos sociales. ¿Y, qué son los hechos sociales para Durkheim?. Antes de nada habría que decir lo que no son los hechos sociales, es decir, acercarnos por la vertiente de la definición negativa a este concepto clave en la sociología durkheimiana, para luego definirla positivamente.
A) Lo que no son los hechos sociales:
- No son los fenómenos físicos,
- No son procesos orgánicos.
- No son tampoco los fenómenos psíquicos.
- No son fruto de individuos o mejor dicho de individualidades.
B) Lo que son los hechos sociales.
- Son las formas de actuar, pensar y sentir que son objetivas y externas al individuo, que tienen un poder de coacción, por el que se imponen al mismo individuo quiera o no quiera.
- Son fruto de la acción múltiple y simultánea de individuos, son por tanto modelos colectivos preexistentes que se nos imponen, elaborados por generaciones pretéritas.
- Son el sustrato social, es decir ese conjunto de modelos colectivos configura lo que Durkheim llama la conciencia colectiva.
- Suelen formularse de manera oral o por escrito, como normas que se transmiten por la educación (aforismos, leyes morales, jurídicas...); quedándose fijadas en obras objetivas (estilos de arte, culturas, modas, etc.)
- Aunque, en parte modificables por nuevas acciones individuales, ofrecen resistencia al cambio.
4.- DEFINICIÓN Y OBJETO DE LA SOCIOLOGÍA DE LA EDUCACIÓN
4.1. Sociología de la Educación: definición y delimitación.
Hay una serie de términos que han venido empleándose a lo largo del siglo XX, que conviene aclarar, si bien no siempre las designaciones de las obras coinciden con el contenido. Asimismo, designaciones diferentes encierran a veces contenidos similares. Sociología de la Educación, Pedagogía social, Sociología educativa y otras disciplinas que contemplan las diversas relaciones de la sociedad y la educación con metodología y objetivos diferentes.
a) Sociología de la Educación. Es una disciplina que utiliza los conceptos, modelos y teorías de la Sociología para entender la educación en su dimensión social. Ha sido cultivada por los sociólogos que han tenido un interés creciente por la educación y por los pedagogos que han pasado de recurrir casi exclusivamente a la Psicología, a un equilibrio entre ésta y la Sociología.
b) Pedagogía social. Es una disciplina pedagógica. Su objetivo es la educación social del hombre. Lo que importa es convertirle en un ser social capaz de integrarse en el medio, de participar activa y responsablemente y en su caso de mejorarlo. Hoy cobra interés especial al considerar la reeducación y la resocialización de todo tipo de marginados sociales.
c) Sociología educativa. Aunque ha arrancado de los social como la condición y el objetivo, sin embargo su intención ha sido fundamentalmente educativa: perfeccionar la conducta del hombre como ser social y a su vez la mejora de la sociedad.
Cuadro 1.7. Disciplinas relacionadas con la educación y su distinción
SOCIOLOGÍA DE LA EDUCACIÓN
PEDAGOGÍA SOCIAL
SOCIOLOGÍA EDUCATIVA
DISCIPLINA
Sociología
Pedagogía
Moral
FIN
Explicar
Socializar
Perfeccionar
AUTORES
Durkheim
(1858-1917)
Nartop
(1854-1924)
Dewey
(1859-1952)
PRECEDENTE
Sociología Francesa
Idealismo Alemán
Pragmatismo EE.UU.
4.2. La Sociología de la Educación como ciencia
Para terminar de delimitar la Sociología de la Educación se exponen a continuación una serie de características propias de esta ciencia:
a) Es una Sociología especial. Es decir, es una de las ciencias sociológicas (como también la Sociología de la Familia, la Sociología del Trabajo, la Sociología de la religión...) que se ocupan de alguno de los aspectos concretos de lo social. En este sentido es una rama de la Sociología General, coordinada con las otras Sociologías especiales mencionadas.
b) Es una Ciencia de la educación, en tanto que tiene como objeto de estudio la educación. Esto no significa que sea una ciencia pedagógica, ni que pertenezca a la Pedagogía, sino que es una ciencia sociológica que pertenece a la Sociología.
c) Es una Disciplina explicativa y descriptiva esencialmente, frente a otras que pretende o tienen por objetivo principal intervenir en el proceso educativo. Esta afirmación que opone la Sociología de la Educación con las Didácticas y Psicología de la Educación, no quita que la Sociología de la Educación posea un carácter provocador y crítico que provoque y oriente con sus resultados cambios y transformaciones.
Por último, su especialista o profesional típico y ordinario es el sociólogo.
BIBLIOGRAFÍA.
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MORALES NAVARRO, J. y ABAD MÁRQUEZ, L.V. (1992), Introducción a la sociología, Tecnos, Madrid
PICÓ, J. y SANCHIS, E. (1996) Sociología y Sociedad, Tecnos, Madrid.
QUINTANA CABANAS, J.M. (1993), Sociología de la Educación, Dykinson, Madrid.